PAMPLONA 30 May. (EUROPA PRESS) -
La combinación de la radioembolización y la inmunoterapia podría abrir la puerta al tratamiento de cánceres hasta ahora incurables, según el doctor Riad Salem, jefe del Servicio de Radiología Intervencionista del Hospital de Northwestern (Chicago, Illinois, Estados Unidos), que ha participado en Pamplona en el Congreso 2025 de la Sociedad Española de Radiología Vascular e Intervencionista (SERVEI). El congreso reúne estos días a más de 300 expertos en el Baluarte.
La radioembolización es un procedimiento mínimamente invasivo que combina la embolización y la radioterapia para tratar cánceres. Su eficacia está especialmente probada en el cáncer hepático, en el que, según el doctor Riad Salem, la radioembolización muestra "datos excelentes" en etapas tempranas de la enfermedad, en la que pueden lograrse curaciones y existen tasas de respuesta superiores al 90%. En contextos más avanzados de la enfermedad, esta terapia permite también acceder a la resección y al trasplante a pacientes que de otro modo no serían candidatos a estos tratamientos.
El médico estadounidense, uno de los mayores referentes a nivel mundial en radioembolización, ha hecho hincapié en los beneficios de este tratamiento en comparación con otras alternativas terapéuticas.
"Hablamos de un tratamiento con un método de administración que permite actuar directamente sobre el tumor, lo que favorece que sea muy preciso y eficaz. Además, se trata de un tratamiento que puede ser ambulatorio, que se realiza en un solo día y en una única sesión, y que, por si fuese poco, puede conducir a la curación. Y todo ello manteniendo la calidad de vida del paciente y sin que existan toxicidades sistémicas", ha afirmado.
Según el doctor Riad Salem, el cáncer hepático es solo la punta de lanza de la radioembolización, que se espera que pronto llegue al tratamiento de tumores en otros órganos, especialmente en combinación con la inmunoterapia. "Existe mucho entusiasmo en torno a esta combinación, ya que mejora la eficacia de ambos tratamientos", ha señalado.
Para el experto, la combinación de estas dos alternativas terapéuticas permite ofrecer a los pacientes tratamientos oncológicos "de vanguardia". "La plataforma que supone una inyección focal intraarterial nos permite estudiar este tratamiento en otros órganos donde existen necesidades médicas no cubiertas", ha apuntado Salem, que ha destacado en ese sentido las posibilidades que la combinación de estos tratamientos ofrece para el abordaje de tumores hasta ahora incurables y con mal pronóstico, como el cáncer de próstata metastásico o el glioblastoma multiforme recurrente, un tipo de tumor cerebral muy agresivo en el que la esperanza de vida apenas ronda los 12-18 meses.