TOLEDO, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha ingresó en 2011 un 71 por ciento de los 192 millones de euros que tenía previsto recibir y ejecutó el 94,82 por ciento de los más de 5.000 millones de euros de su presupuesto --incluyendo las transferencias al SESCAM--, después de que el nuevo Gobierno del PP dotara presupuestariamente aquellas partidas que se habían dotado "insuficientemente" por parte de los gestores socialistas.
Así lo ha desvelado el titular de este departamento, José Ignacio Echániz, durante su comparecencia en la Comisión de Economía y Presupuestos de las Cortes, donde ha destacado que la Consejería ingresó "casi un 30 por ciento menos de lo presupuestado" en 2011 al término del ejercicio, lo que evidencia el "excesivo optimismo, irresponsable e incluso suicida de aquel momento".
Del presupuesto de gasto ha incidido en las facturas que encontró a su llegada a la Consejería que "no tenían hueco presupuestario ni encaje", lo cual fue "una profunda irresponsabilidad", a pesar de lo cual el nuevo Ejecutivo hizo un "esfuerzo para asumir todos y cada uno de los compromisos", alcanzando finalmente "niveles de ejecución muy elevados, hasta un 10 por ciento mas que el último ejercicio del PSOE".
También ha recordado que cuando asumió la gestión de la Consejería se encontró una ejecución "comprometida en casi el 84 por ciento" y "casi agotada antes de tiempo", con porcentajes que evidenciaban que el anterior Ejecutivo socialistas puso "en riesgo" servicios como la sanidad y los programas sociales.
"SITUACIÓN PERVERSA"
Sin embargo, ha continuado, además de que la cifra presupuestaria comprometida a mediados de año era "altísima" y de que se encontraba "también sin pagar", había también "importantes partidas de 2010, por valor de 112 millones de euros" que se incorporaron a las Cuentas de 2011, "consumiendo crédito de este nuevo ejercicio y arrastrando a una situación presupuestaria perversa".
Además, ha detallado el titular de Sanidad, desde la Consejería se tuvieron que cubrir un total de 25 millones de euros en compromisos de gasto de 2010, a través del suplemento de crédito extraordinario que tuvieron que aprobar las Cortes autonómicas.
Todo ello, en una "situación muy delicada" en la que había una "imposibilidad" real de acudir a la deuda -era "misión imposible", ha definido--, un presupuesto "irreal" que era "una auténtica chapuza" y donde "las estimaciones de ingresos y gastos no se ajustaban en absoluto a la realidad".