La citometría de flujo es una herramienta útil para el cribado de los derrames neoplásicos, según expertos

Jhonatan Wong-Arteta (izq.) y Luis Bujanda
Jhonatan Wong-Arteta (izq.) y Luis Bujanda - CIBER
Publicado: martes, 8 marzo 2022 13:00

MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -

La citometría de flujo es una herramienta útil para el cribado de los derrames neoplásicos, según confirma una tesis presentada por el investigador Jhonatan Wong-Arteta y dirigida por Luis Bujanda, jefe de grupo del CIBEREHD en el Hospital Donostia.

La tesis resume tres publicaciones sobre el tema que han contado con la colaboración del del área de Enfermedades Hepáticas y Digestivas del CIBER.

Las enfermedades neoplásicas son una causa frecuente de derrame pleural y ascítico. En el momento en que un derrame neoplásico es diagnosticado la supervivencia del paciente disminuye de forma importante (a 1-6 meses).

Actualmente la citología es el método principal para el diagnóstico de estos derrames; pero es muy lenta, es difícil de ser incluida en la automatización de un laboratorio hospitalario, es poco sensible y posee una variabilidad inter-observador elevada, esto último es debido a que la citología valora cualidades de las células.

Sin embargo, la citometría de flujo es una técnica ampliamente utilizada en el estudio de la sangre; pero poco aprovechada en el análisis de los líquidos pleurales y ascíticos, y a diferencia de la citología, es más rápida de realizar, más fácil de automatizar, y posee una variabilidad inter-observador baja ya que valora resultados numéricos y no cualidades.

En estos últimos años a través de tres estudios realizado por investigadores pertenecientes al Instituto Biodonostia, la Universidad del País Vasco (EHU), el Centro de Investigación en Red en Enfermedades Hepáticas y Digestivas (CIBEREHD) y el Hospital Universitario Donostia coordinados por Luis Bujanda y dirigidos por Jhonatan Wong-Arteta, se ha comprobado que "la citometría de flujo es útil en el cribado de los derrames neoplásicos, evitando la subjetividad y mejorando el tiempo de respuesta en el diagnóstico (de 4 días en 1 día)", indican los investigadores.

Entre los años 2015 a 2019 se han analizado 3.143 líquidos ascíticos y pleurales en el Hospital Universitario Donostia, las muestras procedieron desde los distintos servicios que realizan paracentesis y toracocentesis.

"A través de la utilización de anticuerpos específicos y su posterior análisis por el citómetro se puede determinar la presencia de células tumorales, su estirpe y la presencia de posibles moléculas diana que dirija a tratamientos personalizados. También de forma automatizada y sistemática se podrían detectar células tumorales en otros líquidos que nos permitan adelantarnos a posibles recidivas o aplicar medidas preventivas antes de las mismas", concluyen los investigadores.