MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un riñón bioartificial podría reemplazar la necesidad de diálisis o trasplante en los millones de pacientes con insuficiencia renal. Un requisito clave para un dispositivo así es la formación de una "membrana viva" que consista en una tensa capa de células renales sobre superficies de membrana artificiales y que pueda transportar moléculas de un lado a otro.
En su último trabajo, Dimitrios Stamatialis, de la Universidad de Twente, en Países Bajos; Roos Masereeuw, de la Universidad de Utrecht, en Países Bajos, y sus equipos lo lograron usando células epiteliales del túbulo proximal renal humano (ciPTECs) en membranas de fibra hueca a base de polietersulfona. Demuestran que la monocapa celular es realmente funcional como una membrana viva.
"Este estudio demuestra el desarrollo exitoso de una membrana viva que consiste en una monocapa reproducible de ciPTEC en membranas de fibra hueca, un paso importante hacia el desarrollo de un dispositivo de riñón bioartificial", afirma el profesor Stamatialis.
"Las estrategias y los métodos de este trabajo podrían ser relevantes para el desarrollo de otros órganos bioartificiales, como un hígado bioartificial o un páncreas bioartificial, y órganos sobre chips --como un riñón sobre chip, un pulmón sobre chip o un hígado sobre chip", añade.
La escasez de donantes de riñones y la dependencia excesiva de la diálisis renal, que a pesar de que puede salvar la vida va debilitando al enfermo, hace necesario el avance de esta investigación. En 2010 se trasplantaron 73.179 riñones, cifra muy por debajo de los 800 000 que se necesitan en realidad.