BADALONA (BARCELONA), 12 (EUROPA PRESS)
El Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona), más conocido como Can Ruti, ha desprogramado mil consultas externas y 50 cirugías programadas para mañana, como medida de prevención, después del incendio declarado este mediodía en el centro y que obligó a trasladar 43 pacientes críticos a otros centros, según informó esta noche en rueda de prensa la consejera de Salud, Marina Geli, que se trasladó al hospital.
La consejera quiso dar un mensaje de vuelta a la normalidad en el centro y remarcó que "sólo mañana habrá actividad desprogramada". El hospital cuenta con 631 camas y en el momento del incendio había ingresados 566 pacientes, de los que 461 pasarán la noche en Can Ruti como tenían previsto.
Un total de 43 pacientes críticos han sido trasladados a otros centros, sobre todo enfermos de las unidades de cuidados intensivos, coronarias, reanimación y neonatos. Diez pacientes más de la unidad de pediatría fueron trasladados por la mañana, algunos de ellos por sus propias familias, y doce de hemodiálisis graves también fueron llevados a otros hospitales para que mañana realicen sus sesiones con normalidad. Además, fueron dadas de alta 40 personas.
Según las previsiones, esta noche volverá la luz, que fue cortada a mediodía junto con la línea telefónica, en la "práctica totalidad" del hospital, mientras que a las 19 horas ya se contaba con suministro de agua. El teléfono y los sistemas de información también está previsto que se restablezcan en cuestión de horas para trabajar con normalidad desde mañana, pero en el momento de la rueda de prensa, Geli explicó que no habían podido avisar de la desprogramación de las consultas externas y las cirugías programadas porque no funcionaban todos los sistemas informáticos.
No obstante, sí habían hablado con enfermos de cáncer que realizan tratamientos de quimioterapia, al ser un número menor y tener una atención más personalizada.
A raíz del incendio, parte del cableado de la tercera planta se vio dañado, por lo que ordenaron llevar dos grupos electrógenos que previsiblemente funcionarán durante una semana.
El incidente se originó a las 12 del mediodía en los vestidores de los trabajadores de la planta baja por causas que se desconocen. Inmediatamente, el hospital activó el protocolo de emergencias para estos casos e intentó apagar el fuego que se extendió rápidamente por los conductos de ventilación. No hubo que lamentar heridos, a excepción de una fractura de un bombero.
INSTALAN UN HOSPITAL DE CAMPAÑA.
Sobre las 14 horas trasladaron a un hospital de campaña situado junto a Can Ruti a 110 enfermos, sobre todo de las plantas tercera y cuarta, como medida preventiva y por orden de los Bomberos. Muchos de ellos salieron a la calle por su propio pie y otros se desplazaron a la azotea del edificio. Pese a que hubo que cortar el suministro eléctrico y el teléfono, gracias a la ayuda de grupos electrógenos no fue necesario evacuar urgencias.
Mientras, una treintena de dotaciones de los Bomberos continuaba revisando las plantas superiores del hospital, que no hubo que desalojar, para comprobar sí había alguna afectación por el humo.
A partir de las 16 horas hubo que intensificar los servicios de limpieza y mantenimiento para que los pacientes volvieran a sus habitaciones. Geli destacó que "la respuesta de la gente fue extraordinaria" y remarcó la ayuda de 30 voluntarios de Badalona, así como de los efectivos de Mossos d'Esquadra, Bomberos, Guardia Urbana y Servicios de Emergencias Médicas (SEM).
El consejero de Interior, Relaciones Institucionales y Participación, Joan Saura, se desplazó hasta el hospital esta mañana y defendió que los bomberos actuaron "rápidamente" y que en un primer momento "no pudieron cortar la luz inmediatamente porque todavía se estaban realizando operaciones quirúrgicas". "Cuando terminaron las intervenciones, se pudo controlar rápidamente el fuego", dijo. Se da la circunstancia de que hace tres meses hubo otro incendio, de menores dimensiones, en Can Ruti también en la planta baja del edificio.