El Clínic practica una cirugía pionera para tratar la epilepsia

Actualizado: miércoles, 3 agosto 2011 14:07

BARCELONA, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Unidad de Epilepsia del Hospital Clínic de Barcelona ha realizado el primer implante en España de un sistema de estimulación cerebral profunda para pacientes con epilepsia refractaria, según ha informado el centro en un comunicado.

La epilepsia refractaria es aquella en la que las crisis persisten a pesar del tratamiento médico adecuado con varios fármacos, que en España sufren el 30% de los 400.000 pacientes con epilepsia.

Un porcentaje variable de estos pacientes --alrededor del 15%-- serán candidatos a la cirugía resectiva, y en el resto deben emplearse otros procedimientos como la estimulación cerebral profunda.

La Unidad de Epilepsia del Clínic, coordinada por Mar Carreño, es la única acreditada en Catalunya y España por el Ministerio de Salud para el tratamiento quirúrgico de este tipo de epilepsia, intervención que realizó el neurocirujano del Programa de Epilepsia y Parkinson del Hospital Clínic Jordi Rumià el 21 de julio.

Concretamente, esta terapia --proporcionada por la empresa Medtroic-- ha sido usada durante más de 20 años para otros tratamientos en enfermedades neurológicas, y debe implantarse en el tálamo cerebral.

Para realizar el implante se utiliza un neurosimulador que emite impulsos eléctricos controlados y dirigidos a un área del cerebro: el núcleo anterior del tálamo, zona que tiene fuertes conexiones con otras partes del cerebro implicadas en la generación y propagación de las crisis epilépticas.

El nuevo tratamiento está indicado para reducir la frecuencia de las crisis en adultos con epilepsia refractaria y crisis parciales con o sin generalización secundaria.

Un reciente ensayo de esta terapia mostró resultados "prometedores", ya que tras dos años de estimulación, las crisis se redujeron en un promedio de un 56%, incluidas las más graves.

Con la disminución de las crisis epilépticas, el paciente experimenta una mejora significativa en su calidad de vida y recobra parte de su autonomía para las actividades de la vida diaria.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la epilepsia afecta aproximadamente a 50 millones de personas de todo el mundo y casi un tercio no responde adecuadamente a los fármacos antiepilépticos.