Lo harán en base a un diagnostico del médico y un plan de medicación
BARCELONA, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las enfermeras catalanas podrán indicar el uso de fármacos sujetos a prescripción médica dentro de su ámbito de actuación con una formación específica, según el nuevo proyecto de decreto catalán, mientras que será suficiente la formación de grado --y títulos homologados-- para prescribir productos sanitarios y medicamentos no sujetos a prescripción médica.
Lo ha explicado en rueda de prensa este viernes el conseller de Salud de la Generalitat, Toni Comín, acompañado del director del Servei Català de la Salut (CatSalut), David Elvira, en la que ha presentado el 'Proyecto de Decreto de indicación y uso de medicamentos y productos sanitarios por parte de las enfermeras y enfermeros', que requerirá entre cinco y seis meses para aprobarse.
Dentro de las competencias de la Generalitat, el decreto "blindará con seguridad jurídica una práctica cotidiana" de enfermería de indicación de medicamentos, tanto autónoma como colaborativa, a la que afectó un real decreto estatal de diciembre de 2015, ha celebrado Comín, que ha recordado que se ha negociado durante 15 meses con los profesionales y el sector.
Las enfermeras podrán prescribir medicamentos sujetos a prescripción pero siempre "previo diagnostico del médico, y previa instauración del tratamiento farmacológico", ha dicho Comín, que ha añadido que la Comisión de práctica asistencial se encargará de determinar los ámbitos y la interacción en las que podrán dispensar estos medicamentos.
Este órgano también acordará estándares de conocimiento y tiempo de experiencia y los requisitos de los protocolos de los equipos asistenciales, mientras que la formación específica podrá ir a cargo de los colegios profesionales y al ser preguntado por quién asumirá los costes Comín ha añadido que irán a cuenta del profesional, como toda formación continuada.
La directora general de Ordenación Profesional y Regulación Sanitaria, Neus Rams, ha puesto como ejemplo de productos sanitarios algunos pañales de incontinencia y materiales para curar heridas --entre los que hay algunos de prescripción médica, y que podrá resolver la enfermera--, mientras que los no sujetos a prescripción son medicamentos que tienen un uso y seguridad muy conocidos, como antitérmicos.
"Muchos productos requieren prescripción médica por una cuestión administrativa, pero quien los usa en realidad son las enfermeras", como ocurre con las sondas y las bolsas para recoger las heces en operados de cáncer de colon.
INTERPRETA LA AUTORIZACIÓN
"Es un decreto que nos permite interpretar el real decreto a nuestra manera", con el estrecho margen jurídico que ha dicho que han encontrado en el real decreto: dirá cómo se cómo se interpretara la autorización del medico que requiere el real decreto estatal, y en lugar de requerirse una autorización constante, ésta se basará en un diagnostico, un protocolo, y un plan de medicación.
El real decreto dejaba dos opciones: alterar la realidad asistencial eliminando actuaciones que las enfermeras realizaban desde hace años, o seguir actuando como hasta entonces pero entrando en una zona de inseguridad jurídica, que en alguna comunidad autónoma llevó a enfermeras ante Fiscalía.
"El real decreto no cambió nada porque las enfermeras lo obviaron", ya que la Generalitat puso sobre la mesa un decreto catalán, y ha añadido que durante este tiempo se ha realizado una encuesta para saber hasta qué punto el colectivo de médicos y enfermeras veían necesario este decreto, y que tubo un grado de respuesta altísimo y una unanimidad en la urgencia de la necesidad.
La principal mejora que incluirá, según Comín, será la de proteger la "cultura de la interacción profesional entre médicos y enfermeras, que es un 'win-win" (ganar-ganar), y que se veía dificultada por el real decreto estatal, a la par que dará a las enfermeras la tranquilidad que les ha faltado en estos dos últimos años.