MADRID, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
A los cinco años del diagnóstico la tasa de supervivencia más baja en cáncer se da en los tumores de páncreas y de esófago (menos del 10%), mientras que la más alta en el melanoma cutáneo, cáncer de tiroides y linfoma de Hodgkin (superiores al 80%), según se desprende de un estudio realizado por la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN).
En la investigación, publicada en la revista 'Clinical Translational Oncology', han participado nueve regiones españolas que en la actualidad tienen un registro poblacional de cáncer (País Vasco, Navarra, Cuenca, Girona, Tarragona, Castellón, Albacete, Murcia y Granada).
"Como novedad respecto a trabajos anteriores, destacar que se han incluido todos los tipos de cáncer, desde tumores de cabeza y cuello hasta tumores hematológicos. Estos resultados permiten conocer la probabilidad de sobrevivir a un cáncer de cualquier tipo a los 5 años del diagnóstico en nuestra población", ha comentado la presidenta de REDECAN y directora del Registro de Cáncer de Granada en la Escuela Andaluza de Salud Pública, María José Sánchez.
En concreto, en la investigación se muestran todos los casos de cáncer diagnosticados entre 2000 y 2007 (157.149) y la tasa de supervivencia a los cinco años, mostrando que en hombres el cáncer de testículo y de próstata son los que permiten vivir más tiempo, mientras que en las mujeres son el de tiroides, melanoma, cáncer de mama y linfoma de Hodking, si bien en ellas el cáncer de hígado provoca más muertes que el de esófago.
DIFERENCIAS ENTRE HOMBRES Y MUJERES
Asimismo, los investigadores han comprobado que los tumores de cabeza y cuello han tenido, durante la época de estudio, un pronóstico mejor entre las mujeres y que, incluso, la disminución de la supervivencia con la edad no ha sido tan pronunciada como en otros cánceres.
Y es que, se ha producido una reducción en la supervivencia de cáncer por edad en todos los tumores, si bien ésta ha sido más pronunciada en cáncer de ovario y próstata y menos para tumores de cabeza y cuello. Además, en el análisis el cáncer gastrointestinal con peor pronóstico ha sido el de esófago, al contrario que el de cáncer de colon y recto, con la tasa más alta de supervivencia en esta clase de tumores.
Respecto al cáncer de pulmón, los expertos han recordado que es muy frecuente en hombres y que está aumentando su incidencia entre las mujeres por la incorporación de ellas en el hábito tabáquico.
Finalmente, los resultados han mostrado una ligera disminución de los casos de cáncer de laringe en España debido, a juicio de los investigadores, a la relación que existe entre ellos y la exposición al tabaco, el virus del papiloma humano o por diferencias en la fase en la que se hace el diagnóstico.
"Hace varias décadas, el cáncer era una enfermedad eminentemente mortal, si bien, con la implantación de los programas de cribado, los avances en el diagnóstico y tratamiento, y la mejora en los cuidados de los pacientes, el cáncer se está percibiendo como una enfermedad curable.
Nuestro siguiente objetivo es seguir a los pacientes a más largo plazo para determinar el pronóstico a los 10 o 15 años del diagnóstico y determinar las tasas de curación", ha zanjado la autora principal del trabajo, María Dolores Chirlaque