MADRID 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de Universidad Hamad Bin Khalifa de Qatar han demostrado por primera vez en un estudios publicado en 'Frontiers in Endocrinology' que un gen particular, llamado SDR42E1, es crucial para absorber la vitamina D del intestino y metabolizarla aún más. Este descubrimiento tiene muchas posibles aplicaciones en la medicina de precisión, incluida la terapia contra el cáncer.
La vitamina D no sólo es un nutriente esencial, sino también el precursor de la hormona calcitriol, indispensable para la salud: regula la absorción de fosfato y calcio necesarios para los huesos por parte de los intestinos, así como el crecimiento celular y el correcto funcionamiento de los músculos, las células nerviosas y el sistema inmunitario.
"Aquí demostramos que bloquear o inhibir SDR42E1 puede detener selectivamente el crecimiento de células cancerosas", argumenta el doctor Georges Nemer, profesor y decano asociado de investigación de la Facultad de Salud y Ciencias de la Vida de la Universidad Hamad Bin Khalifa de Qatar, y autor correspondiente del estudio.
Nemer y sus colaboradores se inspiraron en investigaciones anteriores que habían descubierto una mutación específica en el gen SDR42E1, en el cromosoma 16, asociada con la deficiencia de vitamina D. Esta mutación provocó la reducción de la proteína, dejándola inactiva.
Los investigadores utilizaron la edición genética CRISPR/Cas9 para transformar la forma activa de SDR42E1 en una línea celular de un paciente con cáncer colorrectal, llamada HCT116, a su forma inactiva. En las células HCT116, la expresión de SDR42E1 suele ser abundante, lo que sugiere que la proteína es esencial para su supervivencia.
Una vez introducida la copia defectuosa de SDR42E1, la viabilidad de las células cancerosas se desplomó un 53%. Al menos 4.663 genes dependientes modificaron sus niveles de expresión, lo que sugiere que SDR42E1 es un interruptor molecular crucial en numerosas reacciones necesarias para la salud celular. Muchos de estos genes participan normalmente en la señalización celular relacionada con el cáncer y en la absorción y el metabolismo de moléculas similares al colesterol, lo que concuerda con el papel central de SDR42E1 en la síntesis de calcitriol. Estos resultados sugieren que inhibir el gen puede matar selectivamente las células cancerosas, sin dañar las células vecinas.
"Nuestros resultados abren nuevas vías potenciales en la oncología de precisión, aunque la traducción clínica aún requiere una validación considerable y un desarrollo a largo plazo", asegura el doctor Nagham Nafiz Hendi, profesor de la Universidad de Medio Oriente en Ammán, Jordania, y también autor del estudio.
Pero privar de vitamina D a ciertas células no es la única posible aplicación que se les ocurrió de inmediato a los investigadores. Los resultados actuales sugieren que SDR42E1 tiene dos caras: aumentar artificialmente los niveles de SDR42E1 en tejidos locales mediante tecnología genética también podría ser beneficioso, aprovechando los numerosos efectos conocidos del calcitriol sobre la salud.
"Dado que SDR42E1 está involucrado en el metabolismo de la vitamina D, también podríamos apuntarlo en cualquiera de las muchas enfermedades en las que la vitamina D juega un papel regulador", destaca Nemer. "Por ejemplo, estudios de nutrición han indicado que la hormona puede reducir el riesgo de cáncer, enfermedad renal y trastornos autoinmunes y metabólicos".
"Pero estas aplicaciones más amplias deben realizarse con cautela, ya que los efectos a largo plazo del SDR42E1 sobre el equilibrio de la vitamina D aún deben comprenderse por completo", finaliza Hendi.
Enlace: https://www.frontiersin.org/journals/endocrinology/articles/...