MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
El cáncer de próstata es el tumor masculino más frecuente ya que uno de cada siete varones lo sufrirá a lo largo de su vida, pero su aparición en edades avanzadas y su crecimiento lento hace que en hasta un tercio de los nuevos diagnósticos se recomiende no tratarlos y optar por una "vigilancia activa".
"Lo ideal es tratar sólo aquellos que pueden afectar a la esperanza de vida del paciente", ha destacado el jefe de Urología de Clínica Cemtro de Madrid, Fernando Gómez Sancha, en una entrevista a Europa Press con motivo del Día Mundial del Cáncer de Próstata que se celebra este sábado, 11 de junio.
El abordaje de estos tumores ha cambiado mucho en los últimos años, según ha explicado este experto, ya que antes "se hacían muchas biopsias de próstata que detectaban muchos tumores, y se trataban todos amargando la vida al paciente".
Sin embargo, ahora se ha visto que su agresividad varía mucho dependiendo de la edad del paciente y del tipo de cáncer, y su lento crecimiento puede hacer que los pacientes estén incluso años sin síntomas y acaben falleciendo por otra circunstancia, al ser ya mayores.
"Antes se operaban 20 pacientes para evitar una muerte con cáncer. Ahora tenemos más cuidado al tratar porque los tumores que son poco agresivos no progresan, o lo hacen muy lentamente, y en estos pacientes recomendamos de entrada una vigilancia activa con seguimientos periódicos en lugar de tratar de inicio", ha explicado.
ANSIEDAD EN EL PACIENTE POR NO SER TRATADOS
El problema de esta elección es la ansiedad que puede provocar en los pacientes, que se "asustan" al ver que tienen un tumor que no se va a tratar. De hecho, reconoce Gómez Sancha, "hay pacientes que no lo toleran y una de las indicaciones para tratar es el estrés que les genera".
Cuando esto no sucede y el paciente "entiende que no corre riesgo", se van haciendo seguimientos periódicos para ver si el tumor progresa. Además, en el estudio de la biopsia también se pueden hacer análisis genéticos para ver en el interior de las células qué genes presentan alteraciones y hacer una predicción mucho mejor de quién necesita tratamiento, "incluso antes de que el tumor progrese o dé síntomas".
"Los urólogos queremos conseguir determinar con facilidad quién tiene y quién no tiene un cáncer de próstata; distinguir qué cáncer será o no agresivo; y tratarlos de la manera menos lesiva posible", asegura este experto.
SÓLO UNO DE CADA 38 FALLECERÁN POR EL TUMOR
De hecho, aunque uno de cada siete españoles sufrirá un tumor de este tipo, Gómez Sancha asegura que sólo uno de cada 38 pacientes acabará falleciendo por esta causa. En España causa unas 5.400 muertes anuales.
En cuanto al tratamiento, este experto también reconoce que se han experimentado avances que permiten ser más certeros y eficaces, sobre todo en la cirugía para la extirpación del tumor.
Asimismo, los avances en cirugía robótica hacen que en Estados Unidos se use para operar el 95 por ciento de estos tumores y, aunque en España su uso está en una fase más embrionaria, también se está comenzando a usar en la sanidad pública ya que "permite unos resultados mejores en términos de continencia urinaria, menor pérdida de sangre y una recuperación más rápida".
Antes también se utilizaba radioterapia, ha añadido, pero en los últimos años se ha visto que "es menos eficaz y tiene un perfil de complicaciones peor", según este experto, lo que hace que se esté dejando como tratamiento de segunda elección, al igual que otras opciones como la criocirugía o los ultrasonidos localizados de alta intensidad, que "son más controvertidas y han demostrado más utilidad en tumores que recidivan, como opción de rescate".