Canarios, valencianos y gallegos por encima de la media en padecer eyaculación precoz

Actualizado: martes, 2 marzo 2010 15:17

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

Canarios, valencianos y gallegos se encuentran por encima de la media en cuanto al padecimiento de la eyaculación precoz aunque "no va más allá de la anécdota" porque podría responder a la casualidad de la encuesta, según el director del Centro de Estudios Sexológicos de la Universidad de La Laguna (CESEX), Manuel Mas.

Mas puntualizó, en rueda de prensa, que el estudio refleja que la media nacional de varones que sufren la eyaculación precoz está en un 43,1 por ciento aproximado, mientras que Canarias "está ligeramente por encima del 50 por ciento" al igual que la Comunidad Valencia y Galicia aunque no consideró que este ligero incremento se produzca por alguna cuestión en particular.

El director de CESEX ha presentado hoy, en Las Palmas de Gran Canaria, la encuesta elaborada en España a personas de entre 18 y 59 años, que se realizó a 1.000 hombres que tenían relaciones y a 600 mujeres con pareja estable. Los resultados de los hombres ya fueron presentado a finales de 2009 y se concluyó, entre otras cosas, que 4 de cada 10 varones estaban padeciendo la eyaculación precoz. Hoy se dieron a conocer cómo esta situación influye en el sexo femenino y su percepción al respecto.

Mas definió la eyaculación precoz como un "fenómeno de falta de control del acto eyaculatable", ocurriendo antes, durante o "muy poco" tiempo después de la penetración, produciendo "insatisfacción, malestar, angustia, emociones negativas".

Al respecto, apuntó que lo que más le preocupa a las mujeres de este problema "no es el tiempo es, sobre todo, la falta de control". Agregó que esta falta de control implicará "tiempo corto" de la relación que provocará angustia en los implicados.

UN TERCIO DESEARÍA UNA RELACIÓN MÁS LARGA

Por su parte, el médico adjunto vinculado de urología del Hospital Universitario de Canarias (HUC), Pedro Gutiérrez, destacó la "importancia" de la mujer a la hora de que el hombre aborde su disfunción de eyaculación precoz, ya que en relaciones con "filin" ella invitará a su pareja a acudir al servicio sanitario para solucionar el problema.

En este sentido, señaló que el 78 por ciento de las mujeres considera que "se debe ir al médico para solucionar los problemas de eyaculación precoz", lo que sube al 87 por ciento de las féminas cuando su pareja sufre dicha disfunción. Agregó que el 36 por ciento de las mujeres también considera "fundamental" el apoyo a su pareja para superar el problema.

Gutiérrez puntualizó que hombres y mujeres tienen formas distintas de abordar las relaciones sexuales, ya que les preocupan aspectos "diferentes".

En cuanto a la encuesta, indicó que un tercio de las mujeres han reconocido que su pareja "padecen o han padecido problemas de eyaculación precoz a lo largo de su vida". Agregó que otro tercio de las féminas "desearía que las relaciones fueran más larga, de más relación interpersonal y relación sexual"; mientras que otro tercio de mujeres querría que su pareja tuviera un "mayor control" sobre la citada disfunción del hombre.

Además, el médico adjunto de urología del HUC señaló que las mujeres entienden la eyaculación precoz "fundamentalmente" como un "problema de control".

CÓMO IMPACTA LA EYACULACIÓN PRECOZ EN LA PAREJA

Respecto al impacto que provoca en la pareja el hecho de que el hombre tenga eyaculación precoz, Mas subrayó que de las 600 mujeres encuestadas un 85 por ciento considera la vida sexual "importante".

Así, un 89 por ciento de las mujeres, cuando su pareja no tiene trastorno de la eyaculación, declaran tener una vida sexual "satisfactoria".

Asimismo, apuntó que las parejas con eyaculación precoz tienen "menos" frecuencias de relaciones sexuales porque hay una "cierta evitación" tanto de los hombres como de las mujeres, él para "evitar situaciones embarazosas", ella porque le "apetece menos".

Por otra parte, el 75 por ciento de las mujeres, cuya pareja sufre eyaculación precoz, lo califican como una "disfunción severa, grave o importante"; mientras que en la encuesta de hombres "sólo al 50 por ciento" que declaraba sufrir dicha situación les parecía un problema "serio, grave". De ahí, que las mujeres declaran que las "sufren más" que los hombres, lo que Mas consideró "lógico" porque influye en la relación de pareja.

El doctor Gutiérrez, por su parte, aportó que aproximadamente un "tercio de los pacientes que tienen disfunción eréctil, tienen eyaculación precoz" aunque no lo suelen comunicar. De todos modos, señaló que si los hombres acuden al médico con su pareja sí suelen confirmar su problema.

LA EDAD Y LAS DISFUNCIONES

Respecto a si la edad influye a la hora de padecer algún tipo de trastorno, el director del CESEX, Manuel Mas, explicó que hay tres tipos en el hombre, la disfunción eréctil, la falta de deseo y la eyaculación precoz.

En este sentido, puntualizó que en la disfunción eréctil y en la falta de deseo "sí suele haber una relación con la edad, a medida que aumenta la edad, suele aumentar bastante la prevalencia".

Sin embargo, en lo que respecta a la eyaculación precoz "está muy repartida por edades", quedando "bastante repartido" entre los 18 y 59 años (edades de los hombres que han participado en la encuesta).

EL FÁRMACO FUNCIONA

Por otro lado, el doctor Gutiérrez indicó que desde el pasado verano existe un fármaco, que necesita prescripción médica para ser consumido, y que supone un tratamiento alternativo a la psicoterapia para solucionar el problema de la eyaculación precoz.

Gutiérrez señaló que dicho fármaco sirve para que "aumente el control del reflejo eyaculatorio, aumente el tiempo y, por tanto, disminuya la angustia", asegurando que en la dosis máxima (60 miligramos) es "seguro y eficaz".

Además, agregó, que la encuesta recoge que un 64 por ciento de las mujeres opinan que dicho tratamiento "mejorará su vida sexual" y un 60 por ciento, de las féminas con parejas que sufren eyaculación precoz consideran que dicho fármaco aportará "seguridad", repercutiendo en la relación tanto interpersonal como sexual.