SANTA CRUZ DE TENERIFE 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias constata un número acumulado de 481 casos de coronavirus COVID-19 al cierre de la estadística de este domingo, a las 20.00 horas, 67 más que el día anterior.
Así, del total de casos acumulados, 172 han requerido ingreso hospitalario y, de ellos, 32 en UCI, con siete curaciones y 11 fallecimientos, informa en el departamento regional en una nota.
Con respecto a los fallecimientos, 10 han sido en personas de edad mayor o avanzada y uno en una mujer del rango de 34 años de edad con patología previa.
Todos los casos de fallecimientos, hasta el momento, se han producido en personas mayores o con patologías previas, concretamente una mujer de 34 años; cuatro mujeres de entre 62 y 78 años; un hombre de 77 años y tres mujeres y tres hombres mayores de 80 años.
Con respecto a la distribución por islas Tenerife cuenta con 293 casos acumulados --es la que más crece con 31 casos adicionales--; Gran Canaria, 135; La Palma, 21; Fuerteventura, 18; Lanzarote, 9; La Gomera, 3 y El Hierro, 2.
Además, según el último informe de seguimiento de Salud Pública --cerrado a las 15.00 horas de este domingo-- hay un total de 93 trabajadores sanitarios infectados --62 mujeres y 31 hombres--.
Desde el Gobierno regional se insiste en que para mejorar la atención a la población se debe utilizar el número de teléfono de atención al coronavirus habilitado por la Consejería de Sanidad (900 112 061).
Esta línea se ha reforzado para la asistencia a todas aquellas personas que tengan síntomas como tos, fiebre, dolor de cabeza o diarrea y que hayan estado en contacto con personas que hayan viajado a zonas de riesgo como Madrid, País Vasco o Italia.
Desde ese teléfono se valorará y gestionará la realización de pruebas ya que el teléfono 112 es solo para emergencias.
La Consejería remarca que los resultados de las pruebas de coronavirus realizadas se comunicará telefónicamente de manera personal y no debe llamarse a estos números para solicitar resultados pues se corre el riesgo de colapsar las líneas que puedan necesitar personas graves.