NUEVA YORK, 25 Abr. (Reuters/EP) -
El Canadian Task Force on Preventive Health Care, un organismo independiente de expertos de Canadá, rechaza el cribado universal de la hepatitis C y defiende que la población adulta que no se considera un grupo de riesgo de infección no debería someterse a pruebas diagnósticas en busca del virus.
Así lo aseguran en un artículo publicado en la revista 'Canadian Medical Association Journal', tras no haber encontrado ninguna prueba de que el cribado en adultos con poco riesgo fuera beneficioso. Además, advierten de que detectar a todos los afectados requeriría una gran cantidad de recursos.
"Por el momento, no podemos hacer una recomendación para todos los canadienses, independientemente del año en que nacieran, para que se sometan a la prueba de hepatitis C", según Roland Grad, experto que lidera este grupo de expertos que también forma parte de la Universidad McGill de Montreal.
La hepatitis C es un virus transmitido por la sangre y, según datos de los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades (CDC, en sus siglas en inglés), los afectados pueden permanecer sin síntomas durante muchos años pese a luego acabar desarrollando una enfermedad hepática grave.
En su trabajo han calculado que al hacer el test para detectar el virus permitiría encontrar unos 199 afectados por cada 100.000 ciudadanos, lo que serviría para salvar unas 40 vidas, pero "a un coste considerable".
El US Preventive Services Task Force (USPSTF), entidad equiparable a este grupo de expertos pero en Estados Unidos, también tiene dudas sobre este cribado general y considera que las pruebas de detección de la hepatitis C solo deben reservarse a personas con un mayor riesgo de infección, como consumidores o exconsumidores de drogas por vía parenteral o quienes viven en zonas donde la infección es común.
Asimismo, sí que recomiendan el cribaje universal a cualquier persona nacida entre 1945 y 1965, ya que este grupo de población podría tener más riesgo de haberse infectado a través de las transfusiones de sangre.
El grupo de trabajo canadiense dice que no recomendar el cribado universal permite al país centrar sus recursos en realizar las pruebas en quienes tienen más riesgo, según Ellie Carmody, profesora del NYU Langone Medical Center en Nueva York (Estados Unidos), que ha recordado que la situación en Canadá difiere de la de Estados Unidos.
"Canadá está en una circunstancia diferente y en mayores restricciones de recursos y una menor prevalencia de hepatitis C (y) que cambia el perfil beneficio-riesgo de esta enfermedad", ha explicado.