MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que cada año mueren ahogadas en el agua unas 372.000 personas en todo el mundo, unas 40 cada hora, de los cuales más de la mitad son menores de 25 años, siendo una de las diez causas principales de muerte en niños y jóvenes.
Así se desprende de los resultados del primer informe mundial sobre ahogamientos por sumersión elaborado por este organismo de Naciones Unidas, que muestra como las tasas más elevadas de ahogamiento se dan en los menores de 5 años y entre los hombres, que tienen el doble de probabilidades de fallecer por este motivo que las mujeres.
El informe muestra también que más del 90 por ciento de los ahogamientos ocurren en países de ingresos bajos y medianos, con las tasas más altas en las regiones de África, Asia Suroriental y el Pacífico Occidental.
Además, reconocen los autores, es probable que estos datos sean "considerablemente inferiores" a las cifras reales, ya que en muchos países no se incluyen los ahogamientos debidos a suicidios, homicidios o inundaciones.
"Los esfuerzos por reducir la mortalidad infantil han permitido obtener destacados logros en los últimos decenios, pero también han revelado causas de mortalidad infantil que permanecían ocultas", según ha señalado Margaret Chan, directora general de la OMS, que insiste en que "es una forma de morir que puede evitarse" pero, para ello, los gobiernos nacionales y locales deben poner en marcha iniciativas para aplicar medidas de prevención.
El informe destaca la necesidad de potenciar "considerablemente" los esfuerzos y los recursos para prevenir los ahogamientos y se destacan varias medidas, entre las que se encuentra instalar barreras para restringir el acceso al agua; proporcionar lugares seguros para niños, como guarderías infantiles; enseñar a los niños nociones básicas de natación y capacitar a los posibles testigos de ahogamientos en socorrismo y reanimación.
Del mismo modo, en el ámbito nacional abogan por la adopción de reglamentos más rigurosos para la navegación recreativa, comercial y de pasajeros, mejorar la gestión del riesgo de inundaciones y políticas integrales de seguridad acuática.
"Estoy convencido de que no se puede gestionar lo que no se mide, y hasta ahora nunca ha habido un esfuerzo integral por medir los ahogamientos en todo el mundo", ha añadido Michael Bloomberg, exalcalde de Nueva York y fundador de Bloomberg Philanthropies, entidad que financió el informe.
NO ES UN PROBLEMA SOLO DE LUGARES COSTEROS
Uno de los autores y director del departamento de la OMS para la prevención y el manejo de enfermedades no transmisibles, discapacidad y violencia, Etienne Krug, ha reconocido que casi todos los lugares donde hay agua presentan riesgo de ahogamiento. No obstante, ha reconocido que también se pueden producir casos en bañeras, charcas, ríos o piscinas.
En el informe se describen proyectos de prevención de ahogamientos en algunos países de bajos y medianos ingresos con tasas elevadas, tales como Bangladesh, Camboya, China, Filipinas, India, Tailandia y Vietnam. También se recomienda que dichas iniciativas se apliquen y vigilen sistemáticamente con objeto de determinar las mejores prácticas y poner en marcha las que den mejores resultados.
Asimismo, en el informe se subraya la necesidad de que la prevención de los ahogamientos sea parte integral de algunos de los debates sobre temas actuales como el cambio climático, que provoca un mayor número de inundaciones; las migraciones en masa, en concreto para aquellos ciudadanos que piden asilo y se desplazan en embarcaciones; y cuestiones como el desarrollo rural y el agua y el saneamiento. Mejorar la coordinación entre estos diferentes programas, salvará vidas, asegura el informe.