MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 42,6 por ciento de los varones españoles acuden a consultas de Atención Primaria por disfunción eréctil de distintos grados, motivada en un 60 por ciento por patologías orgánicas y no psicológicas, además en España 1 de cada 5 hombres mayores de edad sufre disfunción eréctil, según un estudio de la Asociación para la Investigación en Disfunciones Sexuales en Atención Primaria (AISD-AP) y el trabajo multidisciplinar Epidemiología de la Disfunción Eréctil Masculina (EDEM).
"Es importante que pongamos estos asuntos de salud sobre la mesa en días como hoy, en el que celebramos el Día Europeo de la Salud Sexual. Nuestra intención es animar a todas las personas que sufren algún problema de disfunción eréctil a consultar con su médico y buscar una solución", ha señalado el jefe del Servicio de Urología del Hospital Universitario Sanitas la Zarzuela y secretario general de la Asociación Española de Andrología, Ignacio Moncada.
Para solucionar este tipo de patologías, existen tres opciones con evidencia científica comprobada, que son el tratamiento farmacológico, las inyecciones intracavenosas y la opción quirúrgica con la prótesis de pene. Alrededor de un 15 por ciento de hombres con disfunción eréctil no responden a los tratamientos farmacológicos ni a las inyecciones intracavernosas y requieren implante de prótesis de pene.
El especialista ha advertido que "aún sigue siendo una minoría los que reciben una prótesis, en parte por falta de información y en parte por miedo a preguntar". Además, la realización de esta técnica requiere un grado alto de preparación por parte del urólogo, que debe contar con la destreza y experiencia necesaria para garantizar un óptimo resultado clínico.
El implante de una prótesis consiste en la colocación, dentro del pene, de un dispositivo que produce un aumento de tamaño y rigidez al pene cada vez que el paciente quiera. El implante es perfectamente disimulable e invisible y requiere de una intervención quirúrgica bajo anestesia.
"Pese a ser más invasivo, la eficacia de este procedimiento es altísima y la satisfacción de los pacientes y de sus parejas es mayor que la obtenida con tratamientos farmacológicos", ha añadido el doctor Moncada.
Según el experto, la mayoría de los pacientes retornan rápido a la actividad sexual, con una alta frecuencia de uso de sus prótesis, consiguiendo así que el paciente está menos agobiado, más confiado y por tanto, psicológicamente más tranquilo.
"No debemos olvidar que los factores psicológicos son muy significativos, el hecho de recuperar una erección natural es muy importante. Más del 85 por ciento de los pacientes que la han probado están muy satisfechos y afirman que volverían a operarse de nuevo ya que proporciona una solución definitiva a los problemas de erección", ha concluido.