MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La pérdida dentaria es la causa principal de la necesidad del uso de implantes que, cada año, se colocan en España entre 1,2 y 1,4 millones de piezas, según el Consejo General de Dentistas.
Actualmente, 25 millones de habitantes han perdido, al menos, un diente en España, por lo que la organización resalta que el objetivo principal de la implantología oral es recuperar la funcionalidad de la cavidad bucodental "y no solo algo meramente estético".
Por ello, explican que la mayoría de los implantes dentales están compuestos de titanio o zirconio y se introducen en el tejido óseo, simulando la raíz del diente perdido. Hay tres tipos de implantes: el unitario, que sustituye a un solo diente y ayuda a mantener el hueso sano; el puente implanto-soportado, cuando falta más de un diente; y la arcada completa, cuando hay que reponer todos los dientes de una arcada.
Tras esto, el Consejo General de Dentistas insiste en la importancia de llevar a cabo los cuidados pertinentes. En el caso de sangrado, se debe colocar una gasa en la zona durante 20 minutos. Si la zona se inflama, la organización aconseja aplicar frío desde el exterior de la cavidad oral, así como, tomar dieta blanda, evitar alimentos muy fríos, evitar el alcohol y el tabaco y ser estrictos con la higiene oral.
"Después de la intervención el paciente deberá realizar las consultas postoperatorias con el dentista para comprobar el estado de la cicatrización, retirar las suturas y comprobar la adhesión del implante en el hueso. Cuando el implante esté integrado, se tomarán
las medidas para confeccionar, el puente o la prótesis a medida y se llevarán a cabo varias pruebas de ajuste antes de la colocación final. Como con todos los tratamientos dentales, las revisiones periódicas y el seguimiento de los implantes colocados es primordial", ha explicado el presidente del Consejo General de Dentistas, Óscar Castro Reino.
