BARCELONA 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, ha lamentado este miércoles que se haya intentado sacar "rédito político y sindical" del colapso de las urgencias sanitarias de algunos hospitales durante este verano.
En una entrevista al canal 3/24 recogida por Europa Press, ha admitido que los hospitales de la Vall d'Hebron y Bellvitge han tenido problemas, pero lo ha limitado a incrementos puntuales de la demanda, y ha negado que sea un problema que se pueda generalizar al sistema sanitario catalán.
En ese sentido, ha detallado que la Vall d'Hebron ha sufrido una situación excepcional debido a los cambios organizativos en los que está inmerso el centro, mientras que en Bellvitge el cierre de camas estaba previsto en función de la habitual bajada de la demanda durante el verano, ha apuntado.
Ruiz ha señalado que cuando se detecta un problema en el funcionamiento de los hospitales debería haber más corresponsabilidad política y no utilizarlo para crear un conflicto, que en su opinión no merecen los profesionales médicos ni los ciudadanos, a quienes crea "ansiedades que pueden alterarlos".
Además, ha negado "rotundamente" que exista la voluntad de privatizar la sanidad catalana, y ha pedido a quienes la anuncian que aporten pruebas de ello.
COMPARECENCIA
El conseller, que comparecerá la próxima semana en la Comisión de Salud del Parlament para informar sobre la evolución de las urgencias de los hospitales, ha explicado que pedirá poder comparecer también para explicar "los resultados que los ciudadanos tienen gracias al sistema sanitario público".
Ruiz ha señalado que esos datos "nunca se explican", y ha pedido que todos los partidos trabajen en una misma dirección para ayudar a mejorar la sanidad y evitar la permanente disputa política que entorpece el trabajo.