BARCELONA 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Salud de la Generalitat de Cataluña, Boi Ruiz, ha admitido este jueves en el Parlament que reducir las listas de espera requiere de un "esfuerzo suplementario para financiar la salud", una solución que ha considerado que debe partir del Estado porque se trata de una problemática común en todas las comunidades autónomas.
Boi Ruiz, que ha reconocido que desde que llegó al cargo las listas de espera para las 14 patologías que en teoría tienen un tiempo de espera máximo garantizado han aumentado en 27.600 personas, ha destacado así que se trata de un "problema estructural", agravado por el recorte del 16% en el presupuesto en Salud de la Generalitat en los últimos tres años.
De todos modos, el conseller ha destacado que el 70% de los 181.500 pacientes que esperan por alguno de estos 14 procedimientos se operarán en menos de medio año, y ha garantizado que trabaja en la puesta en marcha de un "modelo integral" para reducir los tiempos más abultados.
En todo caso, ha recordado que el Ministerio de Sanidad trabaja en un real decreto para regular este fenómeno, y ha explicado que la Generalitat está a la espera de conocerlo para modificar la regulación actual, que data de 2002 y es más garantista que la ley estatal de julio de 2011.
Boi Ruiz ha insistido así en que las listas de espera son el resultado de una "subfinanciación crónica histórica", y ha reivindicado que su gestión es pública y transparente, atiende a criterios clínicos, y no está sujeta a ninguna manipulación.
De hecho, ha acusado a los grupos políticos que utilizan las quejas de asociaciones de usuarios de sanidad de practicar una "política de perfil bajo", y ha garantizado que los pacientes entran en la lista de espera en el mismo momento que un médico considera que hay que operar, a diferencia de otras comunidades autónomas que lo hacen más tarde.
ACCESO A LA PRIVADA
En relación con la polémica suscitada por algunas denuncias sobre el traspaso de pacientes desde la sanidad pública a la privada, y avanzar así en las listas de espera previo pago, el conseller ha recordado que se trata de una "práctica rigurosamente prohibida" en la ley.
Así, ha recomendado a los ciudadanos que si tienen constancia de esta práctica la denuncien para que Salud pueda investigarlo, ya que la imposición de sanciones a los centros requiere demostrar que realmente ha sido así.
Los grupos políticos, por su parte, han coincidido en la necesidad de aumentar la financiación en sanidad para reducir las listas de espera y, en general, han agradecido al conseller que les haya facilitado con antelación los resultados semestrales del sistema para poder estudiarlos.
La diputada de ERC Alba Vergés ha recordado que están aumentado las desigualdades "en muchos niveles", también en salud, pero ha recordado que la Generalitat destina el 40% de su presupuesto a políticas sanitarias, por lo que es necesario mejorar la financiación de Catalunya.
"MALESTAR CIUDADANO"
Núria Segú (PSC) ha destacado que el repunte de la actividad quirúrgica no ha sido suficiente para absorber el aumento de la demanda, y sobre todo se ha producido en actividad de poca complejidad, poniendo el acento en que más allá de las listas existe "malestar ciudadano" por la tardanza en las pruebas diagnósticas y las visitas a los especialistas.
Eva García (PP) ha afeado al Govern el recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) por el decreto del Gobierno de 2012 que limitaba el acceso a la sanidad, que ha atribuido a la "insumisión enfermiza" de la Generalitat para con el Estado, y ha considerado que éste era positivo para regular el acceso al sistema porque "las personas en situación irregular colapsan los centros" sanitarios.
La diputada de ICV-EUiA Marta Ribas ha destacado su desconfianza con la gestión de las listas, recordando las quejas de algunos colectivos por supuestas "prácticas fraudulentas", y ha lamentado también el aumento de suicidios.
José Manuel Villegas (C's) ha considerado que el sistema sanitario atraviesa un "estrés difícilmente soportable", y ha ofrecido su colaboración para pedir al Gobierno una mejor financiación en todas las comunidades autónomas.
Por parte de la CUP Isabel Vallet ha lamentado que aunque Boi Ruiz utilice una retórica correcta, en realidad utiliza eufemismos y se contradice en la práctica diaria, al asegurar que se produce una manipulación de datos y no se hace lo suficiente por solucionar el aumento de los problemas de salud mental fruto de la "crisis capitalista".