MÁLAGA 18 May. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Medicina Funcional y del Deporte del Hospital Quirónsalud Málaga dirige un estudio en el que se destaca el papel de las herramientas de bioelectrónica médica en la resolución de lumbalgias crónicas complejas sin respuesta a otros tratamientos terapéuticos.
"La utilización de una metodología médica bioelectrónica, como el Método Teryos, aporta grandes beneficios a los pacientes, al tratarse de técnicas de elevada selectividad, no invasivas y sin efectos secundarios, postulándose como tratamientos de primera línea terapéutica", ha informado el doctor Carlos de Teresa, responsable de Medicina Funcional e investigador principal del ensayo.
Este tipo de dolor de espalda afecta al menos al 80 por ciento de la población en alguna ocasión y, específicamente, "el lumbago crónico es una de las principales causas de baja laboral y el segundo motivo de visita al especialista, por lo que queda patente la necesidad de un tratamiento efectivo para su remisión", ha destacado a través de un comunicado.
La Unidad de Medicina Funcional y del Deporte ha colaborado junto a un equipo multidisciplinar de investigadores de la Unidad de Medicina Clínica Funcional del Hospital Quirónsalud Málaga, de la Unidad del Dolor del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada y del Centro de Investigación Biomédica UGR.
Además, ha participado el Departamento de Ciencias Clínicas de la Universidad Politécnica Delle Marche (Ancona, Italia) con el que han analizado el tratamiento de la lumbalgia crónica con el Método Teryos, una técnica bioelectrónica médica no invasiva, en pacientes con escasa o nula respuesta a tratamientos farmacológicos, intervencionistas, cirugía o fisioterapia.
El resultado de este trabajo, publicado en la revista Journal of Clinical Medicine, ha comprobado la disminución del dolor, la mejora de la funcionalidad y el beneficio en otras variables como el sueño y la calidad de vida que ofrece este tipo de técnicas, además de constatar la nula aparición de efectos secundarios en los pacientes tratados.
"La medicina bioelectrónica está causando un impacto cada vez más importante en la industria de la salud. Estos dispositivos y tecnologías nos brindan una forma diferente de controlar las enfermedades y tienen el potencial de revolucionar nuestro enfoque en una amplia gama de enfermedades y disfunciones", según los investigadores del trabajo.
"Uno de los mayores beneficios de los dispositivos bioelectrónicos es la precisión selectiva que presentan regulando funciones fisiológicas específicas en nuestro cuerpo. Sus ventajas la posicionan para desempeñar un papel de liderazgo en la transformación de la atención médica en los próximos años", añaden.
Este equipo de investigación trabaja en colaboración con la Universidad de Loyola y diversas instituciones, en múltiples proyectos de dolor crónico, dolor neuropático periférico, dolor post-quirúrgico, neuralgias orofaciales y craneales, esclerosis múltiple, pacientes reumatológicos complejos y recuperación de las secuelas postCOVID.
Actualmente, el acceso a este método de tratamiento está disponible, exclusivamente, en la Unidad de Medicina Funcional y del Deporte del Hospital Quirónsalud Málaga, en el Centro Clínico Biotronic Salud, en Granada, en la Unidad de Dolor Crónico en el Deporte de la Clínica de Medicina del Tenis de Madrid y en el Centro MedicalSport de Toledo.
