MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Más del 80 por ciento de los servicios oncológicos públicos y privados de España no realiza cribado psicológico a los pacientes con cáncer para detectar sus necesidades en esta materia, según se desprende del informe 'La atención psicológica al paciente en España', elaborado por el Instituto Max Weber y la Fundación Mylan para la Salud.
El objetivo del trabajo, tal y como ha explicado el director de la Fundación Mylan para la Salud, Javier Anitua, ha sido dimensionar en qué medida los servicios oncológicos "abrazan" a los pacientes con cáncer. "La especial situación que atraviesan en el proceso de su enfermedad estos enfermos hacía que resultara fundamental la elaboración de este informe", ha dicho.
Y es que, se calcula que la presencia de alteraciones emocionales, especialmente ansiedad y depresión, afectan a entre el 5 y el 60 por ciento de los pacientes con cáncer en España. En este sentido, y según los profesionales que han participado en el trabajo, los enfermos con cáncer de mama o páncreas son los que más suelen necesitar este tipo de asistencia, mientras que los de riñón o próstata la requieren en menor grado.
No obstante, si se pregunta a los profesionales de oncológica radioterápica sobre qué pacientes son los que más necesitan atención psicológica, aseguran que, además de los que sufren cáncer de mama, lo suelen necesitar más los enfermos de cáncer de vejiga y estómago. "Los oncólogos han cuidado mucho al paciente con cáncer pero no respecto a su atención psicológica, la cual es la asignatura pendiente y el gran reto que tiene actualmente la atención multidisciplinar del enfermo oncológico", ha dicho la doctora del servicio de Radioterapia del Hospital 12 de Octubre de Madrid, M Ángeles Pérez.
Y es que, el informe, en el que han participado en torno a uno de cada cuatro hospitales con servicios oncológicos en España, ha reflejado que en la actualidad sólo un 44 por ciento de los servicios de Oncología dispone de indicadores de seguimiento, de periodicidad anual (39,1%) o trimestral (26,1%), y las intervenciones psicológicas tienen a realizarse en estadios avanzados de la enfermedad y o desde su inicio.
Además, a pesar de que el 98 por ciento de los oncólogos ven necesaria la atención psicológica a sus pacientes, la mayoría reconoce que necesita más recursos formativos y de personal. "El oncólogo da información difícil a los pacientes y no suele tener formación para hacerlo", ha avisado la doctora del departamento de Psicología de la Universidad Camilo José Cela de Madrid, Marta Redondo.
Del mismo modo se ha pronunciado el jefe de servicio de Oncología del Hospital Universitario de Fuenlabrada (Madrid), Ignacio Juez, quien ha lamentado que en una era con "tantos avances tecnológicos y terapéuticos", los oncólogos están perdiendo la habilidad de comunicar y de sentir empatía con sus pacientes.
"Aprendemos por 'prueba-error' porque la formación en comunicación no es la adecuada, a pesar de que sabemos que el paciente toma sus decisiones en función de lo que le diga, y cómo se lo diga, su oncólogo", ha añadido el jefe del servicio de Oncología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, Pedro Pérez Segura.
Todos estos déficit de atención psicológica impactan en la calidad de vida de los enfermos con cáncer, dado que se ha demostrado que los tratamientos psicológicos ayudan a reducir el distrés, ansiedad, depresión, insomnio, sexualidad, autoimagen, miedo a la recaída, adherencia a los tratamientos y fatiga.
"La intervención psicológica suele llegar tarde", ha apostillado el jefe de servicio de Oncología Médica del Hospital de Getafe (Madrid), Santos Enrech, quien ha coincidido con el resto de expertos, entre los que se encontraba el presidente del Instituto Max Weber, Santiago Pérez Camarero, en la necesidad de desarrollar un cribado psicológico "sencillo y rápido" en las consultas oncológicas para todos los pacientes.
ESTUDIO PILOTO EN CUATRO HOSPITALES
Por otra parte, el doctor Pérez Segura ha informado de que se va a llevar a cabo un proyecto piloto en cuatro hospitales para conocer en profundidad si una formación psicológica especializada entre los oncólogos médicos mejora la calidad de vida de los pacientes.
El estudio se va a llevar a cabo en el Hospital Clínico San Carlos, el Hospital de Getafe, el Hospital Universitario de Fuenlabrada y el Hospital 12 de Octubre de Madrid. Consta de dos trabajos y se van a analizar unos 150 o 200 pacientes.
En el primero de estos estudios se va a desarrollar y validar un instrumento de evaluación para que el oncólogo pueda evaluar en el paciente con cáncer tanto su estado emocional como el afrontamiento que está haciendo de la enfermedad.
Asimismo, en el segundo, se va a formar a los oncólogos en herramientas para comunicarse de un modo "más eficaz" con sus pacientes, especialmente a la hora de darles información difícil, y se analizará el efecto que esta formación tiene sobre los enfermos, especialmente en el manejo de la ansiedad y depresión.
Para ello, se entrevistará a un grupo de pacientes antes de que los oncólogos reciban la formación y a otro grupo de pacientes después, teniendo en cuenta que sean similares en el tipo de tumor y en la gravedad del mismo.
Finalmente, y de forma paralela a este proyecto piloto, se plantea otro estudio general descriptivo exclusivamente con pacientes que busca describir cómo en la actualidad se comunican los pacientes enfermos de cáncer en España con sus oncólogos. Para esta investigación se pedirá a las asociaciones de pacientes su colaboración.