SEVILLA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
La implantación de la receta electrónica en los servicios públicos sanitarios de la comunidad ha mejorado la asistencia que se dispensa a los pacientes, sobre todo en lo que a disminución de las visitas al centro de salud y mejora del control del enfermo por parte del farmacéutico se refiere, según se desprende de una encuesta realizada por el Club de la Farmacia y los laboratorios Almirall a más de 1.600 profesionales del ramo de Andalucía.
Este sondeo, que lleva por título 'Receta electrónica en Andalucía: visión actual y futuro deseable', revela por otra parte como una de las opiniones más generalizadas la necesidad de que tarjeta sanitaria sea única para todo el territorio nacional, lo que, a juicio de los farmacéuticos, mejoraría la coordinación en los distintos niveles asistenciales.
Un 85 por ciento de los encuestados considera también que, pese a la existencia de la receta electrónica, la hoja de medicación activa es indispensable para que el paciente conozca la posología de su medicación, por lo que demandan que no se debería prescindir de ella.
Casi el mismo porcentaje, un 82 por ciento, está de acuerdo en que la receta electrónica ha mejorado el control del paciente por parte del farmacéutico, sobre todo en la detección de problemas relacionados con los medicamentos.
Otro 60 por ciento cree que la implantación de la receta electrónica agiliza, de cara al paciente, el proceso de prescripción y el de dispensación, especialmente en lo que respecta a la burocracia en la tramitación de recetas. El paciente desplazado de su comunidad de residencia habitual puede necesitar adquirir su medicación. En este sentido, el problema es, según un 70 por ciento de los profesionales, que, al no estar implantada este tipo de receta en todo el territorio nacional, el paciente no la puede obtener.
En lo que se refiere a la atención farmacéutica, un 73 por ciento cree que el farmacéutico debería tener acceso al historial terapéutico del paciente, sobre todo para conocer sus alergias a fármacos o qué medicamentos toma en la actualidad entre otros aspectos.
Las oficinas de farmacia de Andalucía otorgan prioridad, según esta encuesta, a informar al paciente sobre su tratamiento activo; es decir, la posología del fármaco, la pauta y la vía de administración.
De este modo, aumenta la calidad asistencial y se reduce la duplicación de recetas y de tratamientos. Además, con la receta electrónica se reduce el tiempo empleado en las visitas al centro de salud, con el consiguiente incremento de las visitas a la oficina de farmacia.
Dos tercios de los encuestados opinan que existen barreras de comunicación entre el médico y el farmacéutico, comunicación que consideran indispensable para trabajar en común por el beneficio del paciente. Un 54 por ciento cree que sería importante crear una línea de comunicación en tiempo real entre el médico y el farmacéutico.
La receta electrónica ha eliminado, además, los errores derivados de la transcripción de la caligrafía del médico, siguiendo las respuestas del 64 por ciento de los farmacéuticos encuestados.
COSTE ADICIONAL EN INFRAESTRUCTURAS Y CAÍDAS DE RED
En lo que a infraestructura se refiere, la implantación y el mantenimiento de la receta electrónica ha supuesto un coste adicional significativo para las oficinas de farmacia, según otro 64 por ciento de los encuestados.
La mayoría cree que con frecuencia aparecen incidencias relacionadas con el sistema electrónico, como las caídas de la red informática. El 41 por ciento por ciento dice que las inversiones que consideran más importantes para garantizar el correcto desarrollo e implantación de este método son las relacionadas con la universalización de la tarjeta médica electrónica y los sistemas de seguridad para impedir las falsificaciones y garantizar la identidad del médico prescriptor.