SEVILLA 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha culminado la modernización de su Área de Radiodiagnóstico a través de la incorporación de una resonancia magnética y un novedoso equipamiento destinado a la detección de cáncer de mama. Ambos equipos, evitarán unos 7.000 desplazamientos a otros centros y proporcionarán mayor agilidad en los tiempos de espera diagnóstica al desaparecer las derivaciones externas de los pacientes.
Así lo ha destacado el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, quien ha visitado este domingo, junto a la consejera de Salud, María Jesús Montero, la Unidad de Gestión Clínica de Diagnóstico por Imagen en la que se ubica el nuevo equipo de resonancia magnética junto a una mesa prona equipada con sistema de biopsia asistida por vacío, últimos avances en los estudios de cáncer de mama.
Precisamente el presidente ha hecho hincapié en lo importante que es la detección precoz para hacer frente al cáncer y ha destacado que Andalucía, con modernizaciones como las llevadas a cabo en el Valme, se sitúa a la cabeza en "la apuesta por la investigación y la prevención". De este modo, los ciudadanos "pueden recibir tratamientos en las mejores condiciones sin salir de Andalucía", ya que "todas las provincias cuentan ya con recursos suficientes para no tener que acudir a centros de otras provincias".
En el Valme, la Consejería de Salud ha invertido en la adquisición de esta tecnología de última generación 1.690.000 euros, lo que ha permitido ampliar su cartera de servicios, incrementar su capacidad diagnóstica y evitar las derivaciones de los ciudadanos a otros centros.
Para la ubicación del nuevo equipamiento se han realizado unas obras de adaptación en el marco del plan de modernización de esta área hospitalaria. Concretamente, se ubican sobre una superficie de 180 metros cuadrados, en los que se distribuyen cinco salas (equipamiento, control, informes, espera de pacientes y espera da familiares, además de vestuarios y aseos), todo ello con un diseño funcional que favorece el trabajo de los profesionales y la comodidad de los pacientes.
Esta actuación supone culminar la reforma y modernización del servicio de Radiodiagnóstico del Hospital de Valme, llevada a cabo en dos fases, que ha supuesto una inversión total de 2,3 millones de euros.
El equipo de resonancia magnética adquirido se caracteriza por su alta resolución (1,5 teslas) con gradientes especiales que permiten realizar estudios de óptima calidad. Además, dispone de herramientas avanzadas de postprocesamiento. Entre las importantes ventajas diagnósticas que presenta, el director de la Unidad de Gestión Clínica de Diagnóstico por Imagen, Rafael Aznar, ha destacado "la disminución del tiempo de exploración, con el aporte de mayor rapidez y precisión de las imágenes, junto a la amplia gama de programas y antenas multicanales que posibilitan desarrollar aplicaciones avanzadas: perfusión cerebral, difusión corporal total, pruebas cardíacas, estudios vasculares de alta resolución o estudios de mamas con biopsias, entre otros".
Además de las aportaciones técnicas, la incorporación de la resonancia magnética en la cartera de servicios del Hospital Universitario de Valme supondrá notables beneficios para los ciudadanos de este área asistencial. Así, además de evitar unos 7.000 desplazamientos por derivaciones a otros centros, este equipamiento realizará pruebas diagnósticas indicadas para estudios neurológicos, articulares en el campo de la traumatología y reumatología, oncológicos, de abdomen y pelvis, cardíacos, vasculares y de mama.
El equipo de profesionales que trabajará en la Resonancia Magnética estará formado por dos facultativos, una enfermera, tres técnicos de rayos, un auxiliar administrativo y un celador.
MEJOR DIAGNÓSTICO POR IMAGEN DE LA MAMA
La Unidad de Gestión Clínica de Diagnóstico por Imagen del Hospital Universitario de Valme también ha sumado dos nuevas técnicas en la detección del cáncer de mama, que completan su cartera de servicios para el abordaje de este proceso. Se trata de la mesa prona y la biopsia asistida por vacío, cuya inversión asciende a 90.000 euros.
La mesa prona constituye el último avance en el campo de la biopsia de mama. Es un equipamiento con un moderno diseño, que permite que la paciente se encuentre más cómoda durante el desarrollo de las punciones de mama al colocarse en posición prona frente a la vertical. Viene equipada con sistema digital de procesamiento de imágenes, lo que permite la elección del objetivo de forma muy precisa, así como la toma de muestras de tejidos mediante un orificio muy pequeño en la mama, evitando la cirugía y, consecuentemente, disminuir riesgos y tiempo de estancia en el hospital.
Su diseño minimiza el estrés de las pacientes durante la biopsia, al realizarse en la parte inferior de la camilla. Esto facilita la actividad de los radiólogos durante el proceso de extracción de muestras, puesto que dispone de un acceso a las lesiones mamarias en 360 grados, permitiéndoles elegir la vía de abordaje más cómoda, corta y estética.
Por su parte, el procedimiento intervencionista de biopsia percutánea con aguja por vacío consiste en un sistema de punción y aspiración por vacío con el fin de obtener abundantes muestras de la lesión, detectada previamente en la mamografía y en la ecografía, para su estudio histológico. Se trata de un método que se lleva a cabo de forma ambulatoria, con anestesia local, poco agresivo y con gran fiabilidad en su diagnóstico. Entre sus ventajas, figura la disminución del número de biopsias quirúrgicas y la selección de pacientes candidatas a cirugía. Por tanto, permite evitar la cirugía en pacientes con lesiones benignas y, en el caso de diagnóstico de malignidad, resecar la lesión en su totalidad en una sola intervención.
Ambas constituyen dos herramientas de enorme importancia clínica, ya que la detección precoz es vital para el buen pronóstico de esta patología y el incremento de las posibilidades de curación. Una estrategia potenciada desde hace doce años por el programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.
Según ha recordado el presidente de la Junta, el cáncer de mama es el tumor más frecuente en la población femenina y también constituye la primera causa de muerte por neoplasia de mujeres de Andalucía. De ahí, que sea tan importante la "detección temprana". En el Área Hospitalaria de Valme se diagnostican cada año 160 casos nuevos.
