CÓRDOBA 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba cuenta con nuevas instalaciones destinadas a la separación, clasificación y ordenación de los residuos que generan profesionales y pacientes del complejo sanitario, un espacio que se conoce como 'punto limpio' y su puesta en marcha pretende "facilitar la distribución de todos los residuos y su posterior reciclaje, tanto los peligrosos como los incluidos en los circuitos normales de recogida de residuos sólidos urbanos".
Según ha indicado la Junta este sábado, el nuevo centro de recogida selectiva de residuos se ubica en la zona norte de la parcela de urbanización del hospital junto a las dependencias de la central térmica, y cuenta con una superficie de unos 1.300 metros cuadrados. Las actuaciones acometidas han supuesto una inversión de 180.000 euros.
Esta iniciativa pretende "cuidar el entorno y figura entre las numerosas medidas emprendidas para mejorar la gestión ambiental impulsadas por el hospital y que responde a la preocupación constante por la minimización de los residuos y su correcto tratamiento y reutilización por los gestores autorizados". Entre los servicios del hospital implicados en la segregación y control de los restos que llegan hasta el punto limpio figuran la Unidad de Gestión Ambiental, Mantenimiento, Medicina Preventiva y Limpieza, fundamentalmente.
CINCO GRUPOS
En todos los centros que conforman el complejo sanitario se generaron el pasado año 3.276 toneladas de residuos peligrosos y asimilables a urbanos, clasificados en cuatro grandes grupos --entre las unidades más generadoras de residuos peligrosos figuran quirófanos y laboratorios--.
Los residuos del grupo I son los sólidos urbanos, los mismos que genera la población, entre ellos, restos de comida, mobiliario, vidrio, cartones o plásticos. Los del grupo II se definen como asimilables a urbanos no peligrosos y se producen como consecuencia de la actividad sanitaria o investigadora (gasas, yesos, sondas).
Los residuos de la tercera clasificación son los sanitarios peligrosos, que requieren una rigurosa gestión, así como tratamiento y transporte diferenciado -los residuos infecciosos, cortantes y punzantes, citostáticos y citotóxicos, de origen químico, líquidos radiológicos y ácidos-.
En el cuarto grupo figuran los residuos radiactivos, que siguen unas pautas de segregación, caracterización, almacenamiento y evacuación muy rigurosa y cuya eliminación compete a la empresa nacional de residuos radiactivos. Finalmente, en una quinta clasificación entrarían los residuos peligrosos de origen no sanitario, donde se incluyen aceites, pinturas o pilas.
Para clasificar y almacenar temporalmente la basura, el 'punto limpio' dispone de tres cubas con una capacidad de 30 metros cúbicos cada uno de ellas, para chatarra, enseres y madera; tres compactadoras de 20 metros cúbicos para material inerte, orgánico y papel y cartón que se vacían diariamente excepto los domingos y que tienen capacidad para contener más de 10.000 kilos en su interior. Por su parte, los residuos peligrosos se depositan en un almacén.
CIRCUITO PROTOCOLIZADO
La separación, recogida y traslado de los residuos sanitarios sigue un proceso protocolizado según sus características (para cada uno se usa bolsa, contenedor y leyenda de colores, tamaños y características diferentes).
Los residuos, generados en las unidades asistenciales y otras dependencias hospitalarias, se depositan en las zonas de sucio de los diferentes centros del complejo sanitario (Hospital General, Materno Infantil, Consulta Externas y Hospital Provincial) para su posterior traslado hasta el punto limpio, que se efectúa en dos camiones --dotado de brazo hidráulico autocargante, ampliamente extendido y muy versátil--. Por su parte, el Hospital Los Morales y el centro de Avenida de América tienen su propio almacén de residuos peligrosos --recogida semanal-- y el resto de los servicios son retirados por la empresa municipal de recogida de basura.
El Hospital Reina Sofía realiza un control y seguimiento "detallado" de la cantidad de residuos que se producen en sus instalaciones y su procedencia antes de la recepción en el punto limpio. En este sentido, a principios de año se implantó un programa de trazabilidad de residuos en el Hospital Provincial que próximamente funcionará en el resto de los edificios y que facilita información al instante y evita posibles errores.
Los centros sanitarios son responsables de la segregación de los residuos, los ayuntamientos de la recogida de los urbanos y asimilables a urbanos y a nivel autonómico se autorizan a las empresas gestoras encargadas de recoger los residuos peligrosos.