Andalucía.- Casi cuatro de cada diez profesionales del Distrito Aljarafe de Sevilla fumadores abandonan este hábito

Actualizado: jueves, 2 septiembre 2010 16:34

SEVILLA 2 Sep. (EUROPA PRESS) -

Casi cuatro de cada diez profesionales tanto sanitarios como no sanitarios del Distrito Sanitario Aljarafe de Sevilla que fumaban, sobre una muestra realizada entre 436 trabajadores de este dispositivo, han conseguido abandonar este hábito pernicioso, según se desprende de una encuesta más amplia dirigida al conjunto de profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y realizada en el marco del Plan Integral de Tabaquismo.

Los resultados indican que, si bien existe un porcentaje importante (28,4%) de fumadores en este equipo profesional, al 72,4 por ciento de los mismos le gustaría dejar el tabaco.

Durante los meses de mayo y junio los profesionales del Distrito Sanitario Aljarafe han participado en el mencionado sondeo, respondiendo a una serie de preguntas sobre si fuman, han fumado o lo han dejado; el número de veces que han tratado de dejar de fumar y su opinión acerca de las medidas reguladoras del consumo de tabaco, entre otras cuestiones.

Los datos obtenidos indican que un 22,9 por ciento de los profesionales manifiestan que fuman diariamente y un 5,5 por ciento lo hace de forma esporádica. En relación al género, el porcentaje de mujeres fumadoras (24,9%) es menor que el de hombres (35%). Además, éstas fuman diariamente menos cigarrillos que los hombres: un 31,5 por ciento de los hombres fuman más de 21 cigarrillos al día, frente a un 7,5 por ciento en el caso de las mujeres.

En cuanto al número de cigarrillos consumidos, el 61,2 por ciento las mujeres fuma menos de 11 cigarrillos al día, frente al 42,6 por ciento de los hombres.

Se ha observado también que el 72,4 por ciento de los profesionales que aún fuman, quieren dejarlo y un 40 por ciento manifiesta que quiere hacerlo a corto o medio plazo. El 39 por ciento ha dejado ya este hábito.

Asimismo, el 55 por ciento de las 165 personas exfumadoras encuestadas logró dejar el tabaco después de dos, tres o más intentos, lo que pone de manifiesto que las recaídas son un paso más en el proceso de dejar de fumar.

Por otro lado el 91,7 por ciento de las personas que ya habían dejado de fumar llevaban más de seis meses abstinentes, es decir: la conducta no fumadora se hace más estable después de seis meses sin fumar, momento en el que la probabilidad de recaer disminuye sensiblemente.

Otro aspecto por el que se ha preguntado a los profesionales es su opinión acerca de las diferentes medidas que se aplican para regular el consumo de tabaco en sus centros de trabajo, entre ellas, la señalización de la prohibición de fumar en el interior de los centros de salud y la oferta de ayuda para dejar de fumar terapéutica a aquellos profesionales que lo deseen.

Un 4 por ciento de los encuestados manifiestan que dichas medidas son exageradas, frente a un 30 por ciento que opina que son insuficientes y el 66 por ciento que manifiesta que las medidas son adecuadas y no necesitan modificaciones.