MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presión arterial alta o la hipertensión es un problema de salud importante que afecta a más de 100 millones de personas en Estados Unidos (usando los niveles actuales de 130 en la presión sistólica u 80 en la diastólica) y más de mil millones en todo el mundo. A pesar de que se considera una enfermedad de adultos mayores, dos nuevos estudios publicados en 'Journal of the American Medical Association' (JAMA) informan de la asociación de la hipertensión arterial con el riesgo de enfermedad cardiovascular prematura (ECV) en adultos menores de 40 años.
En un editorial acompañante publicado en 'JAMA', Vasan Ramachandran, profesor de medicina en la Escuela de Medicina de la Universidad de Boston, Estados Unidos, señala que existen grandes brechas en el conocimiento actual sobre epidemiología, diagnóstico, estratificación de riesgo y gestión de los niveles más altos de presión arterial en jóvenes adultos
Este experto sugiere que se necesitan estudios para comprender las causas de la presión arterial alta. "Saber cómo los determinantes sociales de la salud, los cambios en la cultura, las costumbres, la dieta, la atención médica y el desgaste por estrés repetido o crónico son factores que pueden afectar a la presión arterial en los jóvenes", explica Ramachandran, quien también es investigador principal y director del Estudio del Corazón de Framingham.
Ramachandran cree que se necesita mayor claridad con respecto al uso potencial de las características individuales, los riesgos de ECV a largo plazo (30 años en lugar de 10 años) y el daño al órgano diana en el que media la presión arterial alta (para el corazón, los riñones y los ojos) para guiar las decisiones de tratamiento para los niveles de presión arterial alta en adultos jóvenes.
"Los objetivos óptimos de presión arterial en relación con un beneficio clínico plausible frente a un posible daño debido a una disminución de la presión arterial a largo plazo deben estar claramente definidos para los adultos jóvenes con niveles de presión arterial no normales. El chequeo periódico de la presión arterial en el consultorio de sus médicos (durante las visitas regulares de salud) y medidas de estilo de vida simples, como el ejercicio físico regular y evitar el exceso de peso, pueden ser útiles en adultos jóvenes para mantener niveles óptimos de presión arterial", dice.
Según Ramachandran, unir estas brechas de conocimiento crítico puede ayudar a definir cómo, cuándo y qué se podría implementar para mantener un perfil óptimo de presión arterial desde la infancia hasta la edad adulta y más allá. "Las respuestas a estas preguntas serán un legado de salud pública para la generación actual de niños y adultos jóvenes y para su futura descendencia", concluye.