MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) ha advertido de que las reacciones alérgicas durante la anestesia suponen uno de los principales retos diagnósticos para los alergólogos, ya que su gavedad ponen en riesgo la vida del paciente.
Los estudios realizados en España en los últimos años estiman que la frecuencia de reacciones adversas durante la anestesia oscila en torno a 1 de cada 385 a 1.480 intervenciones. "Estas reacciones suelen ocurrir cuando al paciente se le han administrado una gran cantidad medicamentos de forma simultánea. Por este motivo, en aproximadamente un 10 por ciento de los casos, es necesario interrumpir la intervención. Aunque en otras ocasiones no se llega a iniciar la operación, ya que la reacción ocurre durante la inducción anestésica", explica el doctor Gabriel Gastaminza, miembro del Comité de Alergia a Medicamentos de la SEAIC.
Por este motivo resulta imprescindible realizar un estudio alergológico que ayude a determinar la causa de esa reacción. No obstante, hay que tener en cuenta que los medicamentos administrados durante una intervención tienen efectos farmacológicos que pueden complicar la realización del estudio alergológico.
Cuando ocurre una reacción, el paciente suele estar dormido, por lo que es difícil que facilite datos que ayuden al diagnóstico, como por ejemplo: el tipo de síntomas que presentó, los fármacos utilizados, etc., puesto que los desconoce. "Esa información se encuentra en la nota clínica del anestesista que en ocasiones no figura en los informes médicos. Por lo tanto, el alergólogo se enfrenta a un paciente que no recuerda exactamente qué le ocurrió y es necesario buscar información a través de otros especialistas que, en ocasiones, por la sobrecarga asistencial, no es fácil de recoger", advierte el especialista.
En este sentido, para facilitar el estudio de estos pacientes es fundamental la colaboración entre los médicos de los servicios de Alergología y de Anestesia. En algunos hospitales españoles, ya se han creado equipos que trabajan en conjunto, el binomio anestesista-alergólogo, que se ocupan de recoger los datos de las reacciones y de discutir los casos complejos.
"La mayoría de las reacciones suelen estar causadas por una alergia a los antibióticos administrados como prevención en el acto quirúrgico, o por los fármacos anestésicos, especialmente relajantes musculares. Pero los posibles agentes causantes son muy diversos: antiinflamatorios y analgésicos, opioides, antisépticos, colorantes, productos de la sangre para transfusión o los guantes de látex de los cirujanos pueden ser algunos de ellos", explica el doctor.
ESTUDIO SOBRE LA FRECUENCIA DE LAS REACCIONES ADVERSAS A LA ANESTESIA EN ESPAÑA
Este año se ha puesto en marcha un estudio a nivel nacional, en el que participan catorce hospitales de diversas comunidades autónomas, liderado por el doctor José Julio Laguna, del Hospital Universitario Central de la Cruz Roja de Madrid.
Esta investigación, financiada por el Instituto Carlos III, pretende conocer la frecuencia de estas reacciones en España e investigar los mecanismos involucrados en ellas; si son realmente por alergia o no, y crear unidades alergólogo-anestesista que vayan expandiendo esta forma colaborativa de trabajar. "Los especialistas involucrados en este proyecto confían en que de esta colaboración surja un crecimiento en el conocimiento de estas alergias tan complejas", finaliza el alergólogo.