MADRID 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los aceleradores lineales de nueva generación permiten acortar hasta en un 75 por ciento la radioterapia, tal y como ha demostrado el acelerador 'True Beam', una tecnología contra el cáncer que, según los expertos, configurará en los próximos años un "nuevo paradigma" en el abordaje de esta enfermedad.
De hecho, en los primeros meses de funcionamiento de este aparato, instalado en la Clínica La Luz --el primero en la Comunidad de Madrid--,
ha permitido a los pacientes con tumores complejos de la Unidad de Integral de Oncología Radioterápica de la clínica beneficiarse del llamado hipofraccionamiento, es decir, de una reducción considerable del número de sesiones de irradiación.
De hecho, y aunque cada caso presenta particularidades distintas, este nuevo acelerador de partículas, que permite incluso el tratamiento de enfermos con metástasis en fases iniciales con expectativas de curación, ha hecho posible reducir en un 33 por ciento las sesiones de tratamiento del cáncer de mama (de 30 a 20 sesiones); en un 25 por ciento los de próstata (de 40 a 30) y en un 76 por ciento en los cerebrales y de pulmón (de 30 a sólo siete sesiones).
Asimismo, 'True Beam' cuenta con dos técnicas que permiten optimizar el tratamiento en cada caso: los sistemas de 'gating' respiratorio y el 'RapidArc'. El primero ellos permite sincronizar la respiración del paciente con la administración de las dosis de radiación, reduciendo por tanto al máximo los daños en los tejidos circundantes y, especialmente, en órganos vitales del paciente como, por ejemplo, ocurre en el caso del cáncer de mama y el corazón.
"En el cáncer de mama, al sincronizarse el acelerador con el movimiento respiratorio del paciente, irradiamos siempre en el momento del ciclo del movimiento en el que la mama está más alejada del pulmón y el corazón. Esto, unido a que el 'True Beam' está diseñado para irradiar volúmenes cada vez más pequeños de tejido, nos permite reducir al mínimo la dosis en los tejidos adyacentes", ha explicado la especialista en oncología radioterápica de La Luz, Rosa Meiriño, con motivo de la celebración del Día Mundial contra el Cáncer, el 4 febrero.
Por su parte, el 'RapidArc', una técnica de administración de dosis, permite conformar de una forma "mucho más precisa" el haz de radiación y resuelve los problemas que surgen por la movilidad de los tejidos internos del paciente. Todo ello, además, de una forma "enormemente rápida", según ha aseverado Meiriño.
"Contar con el 'RapidArc', en términos de rapidez, es como dispararle al cáncer con una ametralladora en vez de que con una pistola. El tubo de rayos X de última generación que lleva instalado el acelerador para el control del posicionamiento del paciente permite obtener imágenes en tres dimensiones en un 60 por ciento menos de tiempo y con una tasa de radiación un 25 por ciento menor. Es como un GPS optimizado que reconoce y relocaliza el tumor o la zona de tratamiento inmediatamente antes de emitir la radiación curativa", ha apostillado la especialista.