MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El 85% de las personas que han sufrido un accidente de tráfico y han necesitado hospitalización sufrirá algún tipo de secuela permanente y, de todos los lesionados que sufren algún tipo de baja o impedimento después de un siniestro vial, el 14% se queda con algún tipo de secuela o limitación de por vida.
Así lo pone de manifiesto el último informe del Centro de Estudios 'Ponle Freno'-AXA, elaborado a partir de la base de datos de siniestros de AXA analizando los accidentes con lesiones producidos entre 2016 y 2017. En total, se han analizado 59.771 accidentes, de los cuales se centra en los 33.271 afectados que requirieron baja (56%).
Aunque la mayoría de las secuelas que quedan tras un accidente de tráfico son de carácter leve según el Baremo oficial, casi un 2,4% son graves o muy graves.
Según indica el estudio, cuando un lesionado tiene secuelas, el tiempo de estabilización de las lesiones se duplica respecto a una baja sin secuelas, llegando a los 125 días de media. Un lesionado con secuelas leves tarda un mes y medio en recuperarse, mientras que un lesionado con secuelas muy graves, más de un año, en caso de recuperarse.
Del análisis del informe se desprende que, en promedio, el tiempo que tarda un lesionado en estabilizarse es 63 días: los heridos graves necesitan más de seis meses para volver a sus quehaceres --si bien, según la trascendencia de sus daños, no todos podrán volver a hacerlo--, frente a los 86 días que necesitan las personas que han sufrido una lesión moderada y los 57 días que requieren las bajas leves.
El informe determina que las personas mayores y los niños menores de 15 años son los más vulnerables, ya que duplican y triplican, respectivamente, el porcentaje de lesionados graves. Así, casi el 20% de las lesiones que sufren los afectados de 61 a 75 años conlleva más de 30 días de impedimento e ingreso hospitalario, frente al 7% de media, cuando el 18% de las lesiones que padecen los menores de 15 años son graves y, por tanto, requieren hospitalización.
PEATONES, LOS MÁS VULNERABLES
El informe también analiza el tipo de lesión según el tipo de accidente sufrido. En concreto, las lesiones más graves son las que se producen por atropello a un peatón o ciclista, pues más de la mitad de estos necesita más de un mes para estabilizarse y tres de cada 10 requieren ingreso hospitalario. Por el contrario, las colisiones entre vehículos y las salidas de vía conllevan solo el 5% y el 10% de lesiones graves, respectivamente.
El informe permite conocer también el tipo de lesión dependiendo del vehículo involucrado. Así, los accidentes en los que se ven envueltas motocicletas son los que revisten mayor gravedad, frente a aquellos en los que intervienen camiones o turismos, ya que en el primer caso, el 20% sufrió lesiones que requirieron hospitalización (muy por encima de los segundos y los terceros, con un 11% y un 8%, respectivamente).
Sin embargo, el peatón sigue siendo el peor parado en los accidentes de tráfico, pues el 32% de los lesionados más graves son peatones.
Junto a ellos, motoristas y ciclistas siguen siendo los actores más inseguros en la carretera. Del total de siniestros que sufren los peatones, un 27% requiere ingreso y de los ciclistas, un 24%. Además, los conductores de moto tienen nueve veces más probabilidades de sufrir un accidente grave que los conductores del resto de vehículos.
COMUNIDADES AUTÓNOMAS
El informe hace referencia también a la siniestralidad en las comunidades autónomas: Murcia, Valencia, Castilla León, Castilla-La Mancha y Cantabria superan todas el 10% de lesiones graves en accidentes. Concretamente, la Región de Murcia registra el peor dato, donde casi el 15% de las víctimas en un accidente de tráfico precisa ingreso hospitalario.
Por el contrario, aun siendo la comunidad autónoma más poblada y que registra más siniestros, es en Andalucía donde se producen menos lesiones graves (en el 4,9% de los casos).