MADRID, 25 Mar. (EDIZIONES) -
Son pocas las personas que tienen un botiquín de primeros auxilios en casa y, además, compuesto por los materiales que son necesarios y, para ir más allá, colocado en el lugar adecuado. Desde la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) recuerdan que el botiquín es un elemento "necesario" pero en el que "no cabe todo".
Según afirma la Cruz Roja Española, su contenido ha de permitirnos hacer frente a las situaciones de urgencia que con más frecuencia se presentan en el entorno doméstico, por lo que su composición puede variar según las circunstancias. En este sentido, desde la SEFAC señalan que más del 90% de las lesiones accidentales en el hogar son traumatismos (casi siempre leves, contusiones, heridas o esguinces); el 70% de las quemaduras ocurren en el hogar y el lugar más peligroso es la cocina.
Asimismo, indica que el contacto con objetos punzantes o golpes es también una causa habitual de accidentes. "Esto hace necesario contar en casa con un botiquín de urgencia", resalta. A su vez, recuerda que diversos estudios afirman que más del a mitad de los botiquines españoles guardan más de diez medicamentos, siendo los más frecuentes los analgésicos y antipiréticos, los antiinflamatorios no esteroideos y los antibióticos.
"Un 36% de las urgencias se debe al mal uso de los medicamentos. Por tanto, debido a que son necesarios pero se suelen almacenar de forma excesiva y su mal uso entraña riesgos, es preciso tener unas nociones básicas sobre su uso y conservación correctos", agrega.
Así, desde Cruz Roja ven recomendable que contenga, al menos, los siguientes elementos:
1.- Material de autoprotección: El objetivo del material de autoprotección es que la persona que esté prestando los primeros auxilios no pueda salir herida. Por tanto, tiene que contener:
-Mascarilla de protección facial que se utiliza cuando sea necesaria realizar una respiración artificial boca a boca. Con ella se evita contacto directo con las posibles secreciones o vómitos que la persona atendida pueda tener.
-Guantes de látex o vinilo, que se utilizan siempre que se realice una cura. Protegen contra la sangre otros fluidos y secreciones.
- Toallitas de alcohol, que sirven para desinfectar las manos de quien está auxiliando, pero nunca deben utilizarse sobre las heridas de la persona atendida de manera directa.
2.- Material de hemostasia: Se utilizarán vendas hemostásicas para el control de las hemorragias.
3.- Material de curas, que incluye todo lo necesario para realizar una cura:
-Suero fisiológico para limpiar heridas.
-Antiséptico para prevenir la infección en el caso de las heridas.
-Gasas para cubrir heridas y quemaduras.
-Esparadrapo y tiritas.
-Tijeras de punta redondeada y pinzas sin dientes.
4.- Material de protección de heridas, quemaduras y traumatismos articulares:
-Pañuelo triangular de un tamaño, aproximado, de 140x100x100 centímetros, que nos servirá como cabestrillo, para cubrir heridas e improvisar un vendaje.
- Vendas de diferentes tamaño.
5.- El botiquín para el hogar no debería contener medicamentos: "Una cosa es el botiquín de primeros auxilios y otra distinta, el pequeño dispensario que tenemos en casa, que debería contener elementos como: un termómetro, un aparato de tensión arterial, analgésicos/antitérmicos, una crema antiinflamatoria, una pomada para pequeñas quemaduras, una crema antihistamínica, entre otros".
6.- Desde SIGRE (entidad sin ánimo de lucro para correcta gestión medioambiental de envases y restos de medicamentos) alertan en este sentido de que es importante que no se almacenen medicamentos en el botiquín a la hora de prevenir accidentes derivados del consumo de medicamentos en mal estado o caducados, así como evitar la automedicación no responsable. "El botiquín de casa no debe ser un almacén de medicamentos. Debe contener lo imprescindible para dolencias leves o comunes, materiales de cura, así como los medicamentos para enfermedades crónicas que tengamos, siempre guardados en su envase original y con su prospecto", añade.
7. ¿Dónde debe colocarse? Desde Cruz Roja alertan de que el botiquín de primeros auxilios debe estar instalado en un lugar accesible y conocido por los habitantes de la casa, pero fuera del alcance de los niños pequeños. Además de en una caja hermética y que sea fácil de transportar. Mientras, desde Sigre subrayan que la cocina y el baño son las habitaciones en las que se producen más cambios de temperatura y de humedad, por lo que no son los más adecuados para guardar el botiquín. "Éste debe estar en un sitio fresco, seco y preservado de la luz, para que no se alteren las características y propiedades de los medicamentos", indica.
8.- Es conveniente revisar periódicamente el botiquín de casa para retirar y llevar al Punto SIGRE (en todas las farmacias) todos aquellos medicamentos que estén caducados o en mal estado de conservación, y aquellos que hace tiempo que no se usan o ya no se recuerda ni siquiera para qué fueron recetados.
9.- Todos los miembros de la casa deben saber dónde se guarda el botiquín y cómo usar cada uno de los productos que contiene. "Los elementos del botiquín serán de poca utilidad si no se saben utilizar. Lo mejor es comprar un manual de primeros auxilios y leerlo detalladamente", aconsejan desde SEFAC.
10.- Igualmente, sentencian que si algún miembro de la familia es alérgico a algún medicamento hay que hacerlo constar en un lugar visible del botiquín. A juicio de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria también debe disponerse de una lista de teléfonos útiles en el mismo: 112 Emergencias; Centro de Información Toxicológica (24 horas al 915628585); urgencias del servicio autonómico de salud (061); y bomberos (080).