MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
El virus que causa el herpes labial, junto con otras infecciones virales o bacterianas, puede estar asociado con problemas cognitivos, según un nuevo estudio publicado en la edición de este martes de la revista 'Neurology'.
El estudio encontró que las personas que han tenido mayores niveles de infección en la sangre (medido por los niveles de anticuerpos) y que por lo tanto habrían estado expuestos durante años a varios patógenos, como el virus del herpes simple tipo 1 del virus que causa el herpes labial, es más probable que tengan problemas cognitivos que las personas con niveles más bajos de infección en la sangre.
"Encontramos que el vínculo era mayor entre las mujeres, las personas con niveles más bajos de educación y, de manera destacada, la mayoría de las personas que no hacen ejercicio", explicó el autor de la investigación, Mira Katan, del Centro Médico de la Universidad de Columbia en Nueva York (Estados Unidos) y miembro de la Academia Americana de Neurología. El estudio se realizó en colaboración con la Escuela de Medicina Miller de la Universidad de Miami, Florida (Estados Unidos).
Para el estudio, los científicos evaluaron el pensamiento y la memoria de 1.625 personas, con una edad media de 69 años desde el norte de Manhattan, en Nueva York. Se analizaron cinco infecciones comunes de bajo grado en la sangre de los participantes: tres virus (herpes simple tipo 1 (oral) y tipo 2 (genital) y citomegalovirus; Chlamydia pneumoniae (una infección respiratoria común) y Helicobacter pylori (una bacteria que se encuentra en el estómago).
Los resultados mostraron que las personas que tenían niveles más altos de infección registraron un aumento del 25 por ciento en el riesgo de conseguir sólo una baja puntuación en una prueba común de la cognición denominada Mini Examen del Estado Mental.
Las habilidades de la memoria y el pensamiento se pusieron a prueba todos los años durante un promedio de ocho años y la infección no se asoció con cambios en la memoria y habilidades de pensamiento a través del tiempo.
"Si bien esta asociación debe estudiarse más a fondo, los resultados podrían conducir a formas de identificar a las personas en riesgo de deterioro cognitivo y riesgo más bajo", dijo Katan. "Por ejemplo, el ejercicio y la vacunación infantil contra el virus podrían disminuir el riesgo de sufrir problemas de memoria más tarde en la vida", añade este investigador.