MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El veneno de las arañas y los chiles comparten mecanismos moleculares que activan el dolor, según un estudio de la Universidad de California en San Francisco (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Nature'.
Los investigadores han identificado tres moléculas en el veneno de tarántula que dan lugar a que el mordisco de la araña sea tan doloroso. Los pépticos activan el mismo receptor que el componente picante de los pimientos chiles, lo que sugiere que las tarántulas y las plantas de estos pimientos picantes utilizan tácticas agresivas similares para alejar a los depredadores.
Se conocen muchos aspectos de las toxinas específicas de las arañas que producen choques, parálisis y mortalidad, pero se sabe menos sobre las moléculas que promueven el dolor y la inflamación.
Los científicos describen en su estudio tres partículas aisladas de la tarántula de India Occidental 'Psalmopoeus cambridgei', que se unen y activan a un receptor específico de las neuronas sensoriales para provocar el dolor. Cuando se inyectan estos pépticos directamente en la pata de un ratón se observa inflamación y el ratón actúa como si se sintiera dolorido, pero sólo si poseen el receptor.
El receptor, que permite a los iones pasar a través de la membrana de la célula, también es activado por la capsaicina, el componente activo del chile, los pimientos picantes. El estudio sugiere que la 'P. Cambridgei' y las plantas del chile utilizan mecanismo de señalización molecular similares para provocar dolor y espantar a sus depredadores.
Los pépticos recién descubiertos son también inusuales porque desencadenan una respuesta excitatoria. Los pépticos con estructuras similares que se unen a otros canales iónicos ya se conocen, pero provocan respuestas inhibitorias.