MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio en fase III y tres análisis agrupados de datos fase III han confirmado la eficacia y la buena tolerabilidad del fármaco linagliptina, comercializado como 'Trajenta' por Boehringer e Lilly, en pacientes con diabetes tipo 2, entre los que se encuentran los de edad avanzada y los que padecen nefropatía diabética.
Estos datos se han mostrado en el marco de la 48ª Reunión Anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD). Así, los resultados del estudio fase III de 52 semanas, realizado en 1.261 pacientes mal controlados con insulinoterapia basal, demostraron que su seguridad y tolerabilidad global así como la incidencia de hipoglucemia son comparables a las de placebo. El estudio demuestra un mejor control glucémico de los pacientes tratados con insulina basal y linagliptina.
Por otro lado, linagliptina también ha mostrado su eficacia y seguridad en pacientes mayores en un análisis específico, agrupado, separado de dos estudios fase III, que han evaluado linagliptina frente a placebo como tratamiento complementario a la insulina basal en pacientes con edad avanzada.
De este modo, linagliptina combinada con insulina muestra una buena tolerabilidad en esta población, con una incidencia total de acontecimientos adversos no superior a la de placebo. Además, logra mejorías del control glucémico de un -0,77 por ciento, sin un riesgo excesivo de hipoglucemia.
Un tercer análisis de siete estudios fase III muestra también que linagliptina en monoterapia o en tratamiento combinado con distintos hipoglucemiantes se tolera bien y puede representar una opción terapéutica para pacientes mayores con diabetes de tipo 2 sin necesidad de ajustar la dosis.
"Se trata de datos alentadores en una población cuyo tratamiento supone a menudo un verdadero reto ya que muchos pacientes mayores presentan problemas añadidos de seguridad y tolerabilidad como comorbilidades, función renal alterada y mayor riesgo de presentar episodios de hipoglucemia", ha señalado el profesor Anthony Barnett, profesor emérito de Medicina en la Universidad de Birmingham, en Reino Unido.
Dicho esto, ha señalado que linagliptina parece ser una opción de tratamiento "eficaz" y "bien tolerada" sin necesidad de ajustar la dosis o realizar estrictos controles aún en presencia de una función renal alterada. "En una situación en que las opciones de tratamiento cada vez son más limitadas, la incorporación de linagliptina al arsenal terapéutico existente es bienvenida", ha añadido.