MADRID 24 May. (EUROPA PRESS) -
La vacuna trecevalente contra neumococo que Pfizer comercializa con el nombre de 'Prevenar' permite mejorar la protección del paciente reumático frente a la enfermedad neumocócica, según han destacado los asistentes al 39 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Reumatología (SER), que se celebra estos días en Tenerife.
La presencia de ciertas condiciones médicas subyacentes, como la inmunosupresión inherente a muchas enfermedades reumáticas y a los tratamientos con los que se manejan, aumentan el riesgo de padecer enfermedad neumocócica y de sufrir sus complicaciones.
De hecho, el 'Streptococcus pneumoniae', también conocido como neumococo, se comporta de forma más agresiva y puede tener consecuencias más graves, incluso fatales, en ciertos grupos de riesgo, entre los que se encuentran los pacientes reumáticos.
"La presencia de una comorbilidad como la inmunosupresión relativa a la enfermedad y al tratamiento inmunosupresor aumenta el riesgo de enfermedad neumocócica invasiva y su letalidad", ha destacado la doctora Esther Toledano, reumatóloga del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.
Por ello, ha insistido, vacunarse frente al neumococo es "clave para este tipo de pacientes", ya que no hacerlo "expone al paciente a la infección neumocócica en todas sus formas y a las consecuencias derivadas de ésta, como el ingreso hospitalario y, en casos graves, en unidades de cuidados intensivos".
Los datos disponibles actualmente en la literatura científica internacional muestran que la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente ofrece una buena respuesta inmune y memoria inmunológica para hacer frente a la enfermedad neumocócica, tanto en adultos a partir de 50 años como en niños. De hecho, ofrece la mayor cobertura de serotipos entre las vacunas conjugadas antineumocócicas.
Los 13 serotipos que cubre son, actualmente, los responsables de la mayor parte de los casos de enfermedad neumocócica invasiva en adultos a partir de 50 años.
Ante esta realidad, el doctor Federico Martinón, coordinador de la Unidad de Investigación en Vacunas del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago, recuerda que "la misma vacuna que utilizamos en niños ha sido autorizada para adultos a partir de 50 años, lo que obliga a replantearse nuevas formas de prevención frente a la enfermedad neumocócica y permite plantear incluso nuevas indicaciones".