MADRID 16 May. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones que forman parte de Unidad Enfermera --Consejo General de Enfermería (CGE), el Sindicato de Enfermería, SATSE, la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), la Conferencia Nacional de Decanos de Enfermería (CNDE), Sociedades Científicas Enfermeras y la Asociación Estatal de Estudiantes de Enfermería (AEEE)-- coinciden en la gran importancia de que la Ley de Seguridad del Paciente no sufra notables modificaciones durante el debate de las enmiendas parciales en la Comisión de Sanidad y se apruebe cuanto antes.
Para conseguirlo mantiene su estrategia de buscar todos los apoyos posibles para que la Ley de Seguridad del Paciente sea aprobada cuanto antes en el Congreso de los Diputados y se ha dirigido a los consejeros de Sanidad para que toda la ciudadanía, independientemente de la autonomía en la que resida, pueda beneficiarse de una norma que contribuirá a garantizar una atención sanitaria más segura y de más calidad.
Así, Unidad Enfermera recuerda a los consejeros que esta norma lleva más de tres años en el Congreso de los Diputados, siendo el actual un momento "decisivo" para que se apruebe en los términos en los que fue elaborada con el objetivo principal de garantizar la seguridad asistencial, a través de una asignación máxima de pacientes por cada enfermera en todos los centros sanitarios y sociosanitarios, tanto públicos como privados, de España.
"Esperamos que del debate parlamentario salga una Ley enriquecida con las aportaciones de todos los grupos políticos, una ley mejor, en definitiva, porque eso es lo que queremos todas las personas que trabajamos cada día desde diferentes puestos y ámbitos profesionales para que la atención sanitaria y cuidados que recibe cualquier persona, desde un niño/a a un adulto o un mayor sea la mejor, la que todos y todas necesitamos", añaden.
De otro lado, recuerda que numerosos estudios científicos nacionales e internacionales concluyen en que existe una clara relación entre el número de pacientes asignados a cada enfermera y los riesgos existentes para su salud y seguridad asistencial. A una mayor asignación de pacientes por profesional, más riesgos y complicaciones en el proceso asistencial, así como un incremento de la mortalidad.