"Envejecer bien no es casual, es una responsabilidad y requiere de esfuerzo propio", según María Teresa Sancho
SANTANDER, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
La asesora técnica de la Fundación Matia, María Teresa Sancho, ha asegurado este martes que "el alargamiento de la edad de jubilación no es negativo para el envejecimiento activo", aunque considera que ello "no es una validación" para que las personas tengan que trabajar 'sine die', ya que la edad de jubilación, además de que "debería pasar por la elección" personal, también debe estar condicionada por el tipo de empleo y por la capacidades de cada uno al llegar a una determinada edad.
Así lo ha manifestado Sancho en Santander, en donde ha comparecido en una rueda de prensa junto a la vicepresidenta social de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, Puerto Gómez, en el marco del curso 'Envejecimiento activo: promover la autonomía a través del compromiso y la responsabilidad social' en el que participan en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Sancho ha considerado que los trabajadores deberían "elegir el momento en que uno se jubila", aunque ha indicado que la edad de 55 "no es recomendable para salud ni es sostenible socialmente", y es que, según ha señalado, hay personas que "a los 60 o 65 años están en plena capacidad de producción".
Esta asesora técnica también se ha pronunciado sobre las prejubilaciones que, a su juicio, se está gestionado de "un modo un poco perverso", al mandar a las personas "al paro" de donde cobran una parte de la jubilación y al mismo tiempo que reciben otra cantidad "por la empresa".
"Si fuesen jubilaciones parciales, para estas personas sería una oportunidad de desarrollar un proyecto de vida de futuro" al mismo tiempo que siguen ejerciendo su profesión, aunque no con la misma intensidad, ha indicado, y ha indicado que esto sería "una de las grandes transformaciones para este grupo de población".
SERVICIOS SOCIALES Ante la posibilidad de que los recortes lleguen a estos sistemas públicos, Gómez ha señalado que "la evolución de los servicios sociales ha sido espectacular" en España y se ha tardado "muchos años en conseguirlo", por lo que ha reivindicado que éstos "no vayan en detrimento" y que se intente que "se resquebrajen lo menos posible".
En este sentido, Sancho ha señalado que, a pesar de la situación económica, "no debería tocarse nada", pero ha augurado que "si la partida presupuestaria es menor, seguro que se va a resentir todo ello", ha dicho, y ha reivindicado que "el impacto económico para el Estado no es tanto, pero para las personas -si se quedan sin asistencia- es mucho".
Y es que, aunque no les consta que se estén reduciendo en número de plazas en las residencias, es cierto que hay "mucha incertidumbre" tanto entre las personas mayores como entre los cuidadores. Estos últimos son "profesionales" y "aguantarán el tirón" atendiendo en las mismas condiciones y afrontando la situación con "tranquilidad y prudencia", ha señalado Gómez.
Sobre la situación de Cataluña, donde la Generalitat no ha podido pagar, en el mes de julio, a los geriátricos y residencias de discapacitados y de atención a enfermos mentales, Gómez ha indicado que "existe preocupación" pero ha aclarado que "se trata de centros concertados, con un contrato de por medio que ambas partes deben cumplir".
Sin embargo, ha defendido que "hay cosas que no se pueden permitir y que son innegociables". "Las personas que lo necesiten deben de ser atendidas", ha apostillado.
Estas dos expertas en envejecimiento activo han señalado que, ante la situación de crisis económica, los mayores sienten "desánimo y decepción" al igual que el resto de los ciudadanos, pero ellos "tienen más capacidad de resistencia" porque ya han conocido -Guerra Civil y dictadura franquista_lo que es "la carencia, la austeridad y la privacidad".
En este sentido, han detallado que las personas de más de 55 años tienen "una profunda preocupación", más que por ellos mismos, por sus hijos, que tienen que enfrentar "la incertidumbre de un futuro incierto".
"ENVEJECER BIEN NO ES CASUAL"
Por otro lado, esta experta en el proceso de envejecimiento también ha manifestado que "envejecer bien no es casual, aunque influyan componentes genéticos o la aparición de alguna enfermedad, es una responsabilidad y requiere de esfuerzo propio".
Esos condicionantes personales son los que el Sistema Nacional de Salud y el Sistema de Servicios Sociales tienen que "motivar", al mismo tiempo que realizan campañas de prevención y promoción de la salud o de responsabilidad personal con la salud.
Los mayores y muchos de ellos abuelos, realizan no sólo un esfuerzo sino "un trabajo con un gran valor económico" por su contribución social, y es que el 70 por ciento de los abuelos cuidan de sus nietos, y de éstos el 40 por ciento lo hace durante más de ocho horas al día, una jornada laboral "sin remunerar" y que ayuda a sostener la sociedad.
Este 'trabajo' puede contribuir al envejecimiento activo de las personas mayores "siempre y cuando lo hagan por elección propia", ya que, aunque ellos son "felices" cuidando de sus nietos, en muchas ocasiones lo hacen durante más de 12 horas la día lo que se convierte "no sólo en una carga" sino en "una responsabilidad", aunque, bien es cierto, según ha indicado Gómez, que el cuidado de los abuelos contribuye "positivamente al desarrollo de los niños".