KAMPALA, 16 Ago. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Uganda ha afirmado este miércoles que el país registró en junio un incremento del 40 por ciento en casos de malaria respecto al mismo mes del año anterior, algo que ha achacado a factores como el cambio climático y la llegada de refugiados de otros países de la región.
El Ministerio de Sanidad del país africano ha indicado que el número de casos registrados en junio fue de 1,4 millones, respecto al millón detectado en junio de 2018, en medio de los temores por el brote de ébola en República Democrática del Congo (RDC).
Según estos datos, la malaria es la principal causa de muerte en el país entre los pacientes menores de cinco años, ante lo que el Ministerio ha señalado que "las prolongadas e intermitentes lluvias en partes del país" causadas por el cambio climático han ayudado a este repunte de los casos.
Asimismo, ha citado la llegada de refugiados desde RDC y Sudán del Sur durante los últimos años, el crecimiento de la población y el descenso en el uso de redes antimosquitos como otras causas del aumento del número de casos.
Los datos han sido publicados cerca de una semana después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmara la muerte de al menos 1.800 personas a causa de la malaria en Burundi, con más de 5,7 millones de casos, lo que equivale aproximadamente a la mitad de la población del país.
A pesar de ello, las autoridades burundesas no han emitido aún una emergencia nacional por la malaria, si bien la OMS ya habló de que el nivel del brote tenía "proporciones epidémicas" y apuntó a un "bajo uso" de las medidas de prevención.
La OMS destaca en su página web que la malaria, también conocida como paludismo, "es una enfermedad potencialmente mortal causada por parásitos que se transmiten al ser humano por la picadura de mosquitos hembra infectados del género Anopheles".
El organismo afirma además que "se trata de una enfermedad prevenible y curable" y recalca que "se calcula que en 2017 hubo 219 millones de casos de paludismo en 90 países". Ese año murieron 435.000 personas en el mundo a causa de estas enfermedad.