'P&G Pharmaceuticals' confía que para la primavera de 2007 salga al mercado español su parche de testosterona
SEVILLA, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
Tres de cada diez mujeres españolas sufre problemas de disfunción sexual, un conjunto de trastornos que, en la actualidad, "no se está tratando en España, pese a que cada vez es más prevalente y se pueden tratar", según apuntó hoy la psicóloga y sexóloga del Grupo de Atención Sexual de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), Rosario Castaño.
En rueda de prensa en Sevilla, el ginecólogo y miembro de la AEEM y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) Santiago Palacios explicó, por su parte, que una de cada tres mujeres que acuden a la consulta del ginecólogo o del médico de familia lo hacen por este motivo, pese a las "barreras" que en la actualidad existen, "ya que hoy por hoy el médico no escucha a este tipo de mujer o si lo hace no sabe qué hacer".
Según argumentó, ello se debe a que "tradicionalmente el mundo de la disfunción sexual sólo ha estado en manos de sexólogos, pero no de médicos generalistas y ginecólogos", uno de los posibles motivos, adujo, del por qué de estas dificultades en este tipo de atención.
Por este motivo, Palacios destacó que tanto la SEGO como la AEEM están preparando una serie de cursos on-line de formación continuada en este ámbito asistencial "dirigidos tanto a médicos de primaria como a ginecólogos". Junto a ello, Castaño añadió que en un plazo estimado "de unos dos meses" estas dos sociedades médicas sacarán la primera guía sobre disfunción sexual femenina dirigida al especialista.
Palacios concretó que dentro de la disfunción sexual de la mujer, las alteraciones más importantes son las que tienen que ver con los trastornos del deseo sexual, "lo que puede comportar un empeoramiento de la calidad de vida de la mujer", advirtió.
Tras detallar que dentro la disfunción sexual de la mujer los trastornos más importantes son las que tienen que ver con "las alteraciones del deseo sexual, de la excitación, del orgasmo y los problemas del dolor", dicho experto se refirió a la importancia que los mismos están cobrando, "ya que tanto la Agencia Europea del Medicamento (EMEA) como la Agencia de la Alimentación y el Medicamento de EEUU (FDA) ya han aceptado el diagnóstico de la disfunción sexual".
Con todo, precisó que para la aceptación, por parte de estas dos agencias, del diagnóstico de estos trastornos --lo que supone entenderlos como una patología-- la mujer tiene que reunir dos requisitos fundamentales, estos es, "que exista una alteración del deseo sexual y que este alteración le afecte emocionalmente".
PARCHE DE TESTOSTERONA
Precisamente para este grupo de mujeres, el coordinador de los estudios Intimate 1 y 2 y profesor en la George Washington Univesrity, el doctor James Simon, se refirió a la existencia de un parche transdérmico de testosterona, un tratamiento, del que subrayó, "por primera vez en la historia de la medicina se ha comprobado que mejora los síntomas psicológicos de la mujer" afectada por este problema, según se desprende de dichos estudios "basados en medicina de la evidencia".
Preguntado por los posibles efectos secundarios que este parche podría generar debido al uso de testosterona en la mujer, negó que pudieran generar "una masculinidad en la mujer", ya que, según explicó, "las dosis de testosterona son bajas". De igual forma, señaló que habitualmente se suele "olvidar" que la mujer "no sólo produce estrógenos, sino testosterona y, de hecho, a lo largo de su vida producen más testosterona que estrógenos".
COMERCIALIZACION EN ESPAÑA
En cuanto a la autorización de estos parches, el director médico de 'P&G Pharmaceuticals', Joaquín Delgadillo, sostuvo que este tratamiento ya ha sido autorizado, en julio de este mismo año, por la EMEA. Respecto a su posible autorización y comercialización en España, fuentes de la citada compañía consultadas por Europa Press confiaron que "para comienzos del próximo año" se autorice su uso por la Agencia Española del Medicamento, por lo que estimaron que "para la primavera de 2007" esté ya en el mercado español.
Con todo, Palacios quiso dejar claro que el uso de estos parches "se haría en combinación con estrógenos" y siempre sujeto a un perfil muy específico de mujer.
Al hilo de ello, dijo que alrededor de un 14 por ciento de las españolas sufre menopausia quirúrgica, "una alteración que provoca en el 50 por ciento de estos casos una disfunción sexual". Sobre éste último grupo de mujeres que le ha provocado dicha disfunción sexual, indicó que "a la mitad de ellas esta disfunción le preocupa". Precisamente a este último segmento diana, "es para el que está indicado el parche", concluyó.