MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
La tomografía por emisión de positrones (PET) evita tener que realizar otras pruebas diagnósticas invasivas y con riesgos para el paciente, como biopsias o cirugías diagnósticas, en un 76% de los casos, según informó hoy la Agencia Española de Tecnologías Sanitarias (AETS) en un comunicado tras un estudio realizado por la propia entidad.
Aunque la PET se utiliza actualmente como prueba complementaria a otras técnicas de diagnóstico por la imagen como la tomografía axial computerizada (TAC) o la resonancia magnética (RM), se diferencia de otras técnicas ya que es capaz de detectar los cambios bioquímicos relacionados con la enfermedad, proporcionando información metabólica y funcional, no solamente anatómica.
Los resultados del estudio señalaron que la PET modifica el diagnóstico y el estadio tumoral hasta en un 57% de los casos. Además, conduce a cambios en el tratamiento previsto antes de realizar esta prueba en un 79% de los pacientes, pudiendo realizar "un pronóstico fiable", y determinar cuál es la opción terapéutica más apropiada en cada fase de la enfermedad obviando la cirugía o los tratamientos muy agresivos para el paciente.
Al mismo tiempo, la AETS también señaló que la oncología es actualmente "la principal aplicación" de la tomografía por emisión de positrones. Según destacó el doctor Trampal, responsable médico asistencial de IAT- CRC Corporació Sanitària, el 80% de las exploraciones PET realizadas son en pacientes con cáncer ya que tiene una sensibilidad del 96% a la hora de diferenciar "entre una lesión tumoral y una lesión no tumoral benigna".