MADRID 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Newcastle, en Reino Unido, aseguran que el consumo de un tipo de alga marina parda, el kelp (en la imagen), ayuda a reducir la ingestión de grasas del organismo hasta en un 75 por ciento, por lo que puede convertirse en un nuevo método para combatir la obesidad, según los resultados de una investigación presentados en la reunión que la Sociedad Química de Estados Unidos está celebrando estos días en San Francisco (Estados Unidos).
Estos beneficios, que son superiores a los que ofrece cualquier tratamiento contra la obesidad, se debe a una fibra que contiene este tipo de alga, la alginata, con la que se está trabajando para añadirla al pan en un intento por desarrollar alimentos que ayuden a perder peso.
Los ensayos clínicos están enfocados a averiguar cuál sería la efectividad con una dieta normal, según explicó el doctor Iain Brownlee, coautor del estudio. "Si podemos agregar esta fibra natural a los productos que ingerimos comúnmente, tales como el pan, las galletas, los yogures, hasta las tres cuartas partes de la grasa contenida en esos alimentos, simplemente, pasaría a través del cuerpo", aseguró.
Para comprobar estos beneficios, los científicos utilizaron un "intestino artificial" para probar la efectividad de 60 diferentes fibras naturales, midiendo hasta dónde influía cada una de éstas en la digestión de la grasa. "Las supuestas curas milagrosas del sobrepeso se cuentan por cientos, pero sólo unos pocos casos presentan la evidencia apropiada para respaldar sus afirmaciones", explicó Brownlee.
Las alginatas ya se utilizan en pequeñas cantidades en alimentos como espesantes y estabilizadores, y los investigadores son optimistas después de haber obtenido resultados "alentadores" con este pan con alginata.
No obstante, puntualizó, "sólo podremos empezar a recomendarlo si podemos ofrecer clara evidencia basada en pruebas rigurosas."