El tabaco, el alcohol y el estrés influyen en la menor talla de los recién nacidos

Actualizado: jueves, 11 mayo 2006 20:30

MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -

Hábitos de vida como el consumo de tabaco y alcohol, el estrés y la edad tardía de la maternidad son algunos factores que determinan la menor talla de los recién nacidos, un problema que afecta cada año en España a entre 23.000 y 69.000 niños (entre un 5 y un 15%) que son pequeños al nacer para su edad gestacional y tienen una longitud o peso inferior a la media. Asimismo, se calcula que en un 40% de los casos el desarrollo de este trastorno se basa en factores genéticos.

La mayor parte de estos niños solventan sus problemas de crecimiento antes de los dos años de vida, y un pequeño porcentaje continúa recuperando talla después, pero a los 18 años, aproximadamente, el 8% no ha recuperado una talla normal.

En la Unión Europea, los estudios señalan que unos 319.00 niños nacieron con este trastorno en 2002, aunque los especialistas creen que este trastorno está infradiagnosticado. Estos datos fueron hechos públicos en el marco del XXVIII Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica, que celebra en Cádiz.

Según el doctor Manuel Pombo, del Servicio de Endocrinología Pediátrica del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, los trastornos aparejados a este síndrome se manifiestan en la edad adulta si no se diagnostica y se trata a los afectados correctamente.

En general, estos niños tienen mayor riesgo de desarrollar problemas endocrinos como dislipemia, obesidad, hiperinsulinismo, hipertensión e, incluso, diabetes tipo 2 a largo plazo. Se trata del denominado 'síndrome metabólico', que conlleva un mayor riesgo de presentar problemas cardiovasculares en la edad adulta.

A este respecto, el doctor Antonio Oliver, del Servicio de Endocrinología de la Clínica Infantil de La Paz, dijo que "estos pequeños tienen el doble de probabilidad de sufrir este síndrome que un niño nacido normal". Además, según el doctor Juan Pedro López Siguero, del Hospital Materno Infantil de Málaga, también es destacable el "retraso intelectual" que presentan.