Siguen siendo la segunda causa de muerte entre menores de 15 años, tras los accidentes
MADRID, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
La tasa de supervivencia de los niños diagnosticados de cáncer a los cinco años en España es "superior al 70 por ciento", a pesar de que la incidencia de este tipo de tumores se mantiene en los 137,9 casos por millón de habitantes en los niños hasta los 14 años y que los efectos a largo plazo de este tipo de enfermedades son "poco conocidos", según el informe 'La situación del cáncer en España, 1975-2006', del Instituto de Salud Carlos III.
Los tumores infantiles siguen siendo la segunda causa de muerte entre los menores de 15 años, por detrás de los accidentes. En este tipo de cánceres los factores más influyentes son los genéticos, aunque también tienen su peso determinados factores etiológicos ambientales conocidos, como las radiaciones ionizantes. Pese a la investigación de los últimos 30 años, la mayoría de tumores infantiles sigue siendo de etiología desconocida.
Según los datos de este trabajo, la tasa de mortalidad por tumores infantiles en España "ha disminuido significativamente". En niños, el número de defunciones descendió de las 1.941 del periodo de 1977-1981 a las 571 del último periodo estudiado (2002-2006), mientras que, en niñas, se pasó de los 1.399 fallecimientos de 1977-1981 a las 380 de 2002 a 2006.
Así, para el conjunto de estos tumores, las tasas ajustadas descendieron entre el primer y el último quinquenio estudiado de 77,34 a 35,77 defunciones por cada millón de habitantes y año en niños y de 59,21 a 25,25 en niñas, apunta este informe.
Por tipos de cánceres, en niños, los de mayor mortalidad en último periodo estudiado fueron las leucemias (227) y los tumores del SNC (115). No obstante, las que más se redujeron fueron los fallecimientos por leucemia, pasando de las 732 defunciones registradas entre 1977 y 1981 hasta las 227 del periodo 2002-2006. También descendieron considerablemente los fallecimientos por linfoma no Hodgkin (LNH), de 199 a 46.
También en las niñas los tumores malignos que más mataron fueron las leucemias y los cánceres del SNC. Sin embargo, fueron también algunos de los que más vieron reducida su mortalidad, pasando, en las leucemias, de las 492 del primer periodo estudiado a las 151 de las últimas cifras, y en los cánceres de SNC de los 410 hasta los 86 de los últimos años. Se redujo también la mortalidad por LNH --de 63 a 18--y por linfoma Hodgkin, de 13 a 1.
CANTABRIA Y CASTILLA Y LEÓN, LAS DE MAYOR INCIDENCIA
Por comunidades autónomas, en el periodo 2002-2006, las mayores tasas de mortalidad por cáncer en niños se registraron en Cantabria, con 52,16 fallecimientos por millón de habitantes y año, seguida de Canarias (47,37), Andalucía (41,89), Navarra (47,17), Comunidad Valenciana (40,91), Castilla y León (40,02), Murcia (38,93), Galicia (34,91), Aragón (34,22), Extremadura (32,46), Baleares (31,81), Cataluña (30,29), Castilla-La Mancha (29,89), Asturias (29,88), La Rioja (29,56), Madrid (28,43) y País Vasco (25,91).
En niñas, aunque con tasas más bajas, las autonomías con mayores tasas de tumores malignos son Castilla y León (36,73), Andalucía (31,92), Aragón (31,38), Asturias (30,88), Murcia (29,91), Galicia (28,72), Canarias (26,93), Comunidad Valenciana (25,18), Madrid (22,2), Navarra (20,42), Cataluña (20,23), Castilla-La Mancha (19,89), Cantabria (18,38), Extremadura (17,5), Baleares (17,03) y País Vasco (16,18).
En incidencia, los cánceres infantiles más frecuentes en España son las leucemias, con 41,1 casos por millón de habitantes; los tumores del sistema nervioso central (SNC), con 27,6 por millón, y los linfomas, con 19,3 por millón de habitantes. Les siguen los neuroblastomas (12,6 por millón de habitantes) y los tumores óseos y los renales, ambos con 7,6 por millón de habitantes. Después están los sarcomas de tejidos blandos (9), los tumores de células germinales (3,8) o los retinoblastomas (3,6), entre otros.
Respecto a Europa, España ocupa un lugar intermedio, el puesto número siete en una lista de 26 países con una incidencia total de 137,9 casos por millón de habitantes. Sólo superan a España Alemania, Bielorrusia, Bulgaria, Dinamarca, Eslovaquia y Eslovenia. Con las menores incidencias están Turquía, Suiza, Suecia o Rumanía, República Checa, Reino Unido o Portugal.
Sin embargo, la tasa de linfomas --con 19,3 casos por millón de habitantes-- se sitúa en uno de los primeros lugares, junto con países como Portugal, Lituania y la República Checa, con unos valores que casi doblan las tasas estimadas en Reino Unido, Islandia y Noruega.
LIMITAR LAS EXPLORACIONES RADIOLÓGICAS
En conclusión, el documento apunta que, en general, "la incidencia de tumores infantiles en los países occidentales se mantiene estable o aumenta ligeramente". "Sin embargo la mortalidad disminuye, debido sobre todo al descenso en la mortalidad que se registra en los niños con leucemias y tumores del sistema nervioso central, debido probablemente a los enormes progresos terapéuticos obtenidos en las últimas décadas".
"El escaso conocimiento que tenemos sobre la etiología de la mayor parte de los tumores infantiles hace difícil identificar claramente estrategias preventivas encaminadas a disminuir su incidencia", reconoce el texto.
Sin embargo, apuesta "por limitar, en la medida de lo posible, las exploraciones radiológicas en todas aquellas mujeres que pudieran estar embarazadas o que lo estén, así como otras exposiciones médicas que no estén claramente indicadas durante el embarazo". "Las mismas recomendaciones se hacen extensibles a los niños", apuntan.
"Además --aseveran--, los estudios publicados en relación con el posible papel de las exposiciones paternas en el medio laboral sobre el riesgo de cáncer en la descendencia refuerzan la necesidad de cumplir estrictamente las medidas de protección especialmente en trabajadores expuestos a radiaciones ionizantes, a hidrocarburos aromáticos policíclicos y a metales pesados".