La sobrexposición al bisfenol A aumenta el riesgo de disfunción sexual masculina

Actualizado: miércoles, 11 noviembre 2009 11:38

MADRID 11 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los niveles elevados de exposición en el medio laboral al bisfenol-A (BPA), un componente químico presente en plásticos de embalar, podrían aumentar el riesgo de disfunción sexual masculina, según un estudio de la Institución Kaiser Permanente que se publica en la revista 'Human Reproduction'.

El estudio ha examinado durante 5 años a trabajadores de fábricas donde está presente el BPA y los ha comparado con aquellos que realizan su jornada laboral en ambientes libres de este componente. Los resultados mostraron que los trabajadores expuestos a BPA en sus fábricas tenían cuatro veces más riesgo de disfunción eréctil y siete veces más posibilidades de tener dificultades en la eyaculación.

Según señalan los investigadores, este es el primer estudio que examina el efecto del BPA sobre el sistema reproductivo masculino en humanos. Estudios previos en animales han mostrado que el BPA tiene efecto perjudiciales sobre este sistema orgánico en ratones y ratas.

El BPA es un componente químico que emplea en la producción de plásticos policarbonatados y resinas de pegamento de biberones infantiles, contenedores de plástico, la superficie de latas para bebidas y comidas y en selladores dentales. Los autores añaden que los niveles de BPA a los que estaban expuestos los trabajadores industriales del estudio eran 50 veces superiores a los del ciudadano medio en los Estados Unidos.

Según explica De-Kun Li, director del estudio, "ya que los niveles de BPA en este estudio eran muy altos, serán necesarias más investigaciones para ver cómo un nivel bajo de exposición a BPA podría tener efectos sobre el sistema reproductivo". Para Li, el estudio plantea la cuestión sobre si existe un nivel seguro de exposición y señala la necesidad de más estudios que ayuden a desarrollar métodos de prevención y políticas reguladoras.

Los investigadores compararon 230 trabajadores expuestos a altos niveles de BPA en sus trabajos como empaquetadores, supervisores técnicos, técnicos de laboratorio y trabajadores de mantenimiento en una fábrica de producción de BPA y tres fábricas que utilizaban BPA para fabricar resina de pegamento en varias regiones cerca de Shanghai con 404 trabajadores de la misma ciudad de fábricas sin exposición a BPA en el lugar de trabajo. Las fábricas que no incluían BPA producían materiales de construcción, suministros hidráulicos, maquinaria, vestidos, textiles y electrónica.

Los investigadores midieron los niveles de BPA al tomar muestras del aire del lugar, revisar registros de la fábrica y mediante entrevistas a los trabajadores y líderes sobre los hábitos de higiene personal, el uso de equipamiento protector y las exposiciones a otros químicos. Un subgrupo de trabajadores también proporcionó muestras de orina para examinar los niveles de BPA y confirmar la exposición elevada.

Los autores del trabajo midieron el funcionamiento sexual a través de entrevistas personales utilizando una escala estándar que mide cuatro categorías que incluyen el funcionamiento eréctil, la capacidad eyaculatoria, el deseo sexual y la satisfacción global con la vida sexual.

Después de tener en cuenta aspectos como edad, estado marital, tabaquismo, antecedentes de enfermedades crónicas, exposición a otros químicos y antecedentes laborales, los investigadores descubrieron que los trabajadores expuestos a BPA tenían un riesgo significativamente mayor de disfunción sexual en comparación con los trabajadores no expuestos.

Los trabajadores expuestos al químico tenían un riesgo cuatro veces mayor de menor deseo sexual y menos satisfacción global con su vida sexual, cuatro veces más posibilidades de dificultades en la erección y siete veces más riesgo de problemas con la eyaculación.

Los autores descubrieron que a mayor nivel de exposición a BPA mayor era el riesgo de disfunción sexual. Además, en comparación con los trabajadores no expuestos, aquellos que sí lo estaban informaban de mayores frecuencias de disfunción sexual en un año de trabajo en las fábricas con exposición al químico.