MADRID 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El sobrepeso no siempre es algo nocivo para la salud, según se ha explicado en la I Sesión de Conferencias organizadas por el Instituto Danone y la Real Academia Nacional de Medicina (RANM). Además, aspectos como la ciencia de la metagenómica y las puertas que abre ésta a nuevos tratamientos han sido discutidos durante la jornada sobre las repercusiones de la obesidad en la salud.
En los últimos años, el crecimiento de la obesidad en España "se ha estabilizado", lo que es considerado como una "buena noticia" para los expertos. Sin embargo, los datos no son alentadores, ya que el nivel de ciudadanos adultos con sobrepeso es del 62 por ciento. En concreto, un 39,4 por ciento exceden el peso recomendado, mientras que el 22,9 por ciento padecen obesidad.
Los especialistas recuerdan que la obesidad "es un factor de riesgo de primer orden para las enfermedades cardiovasculares y metabólicas". Además, también es un motivo de preocupación para el sistema sanitario, "por el coste que origina un crecimiento continuo de los factores de riesgo de enfermedad entre la población", manifiestan.
LA METAGENÓMICA "ABRE IMPORTANTES VÍAS DE INVESTIGACIÓN"
En opinión del catedrático de Medicina y Académico de Número de la RANM, el profesor Serrano Ríos, el estudio del microbioma humano "abre a la ciencia importantes vías de investigación". Ésta se encarga "de la interacción entre los microbios y los organismos en su ambiente natural y recibe el nombre de metagenómica", sostienen.
Por tanto, la adquisición de bacterias en el intestino "cumple una función muy importante a nivel metabólico, pues permite que aprovechemos nutrientes que serían indigeribles y facilitan la producción de vitamina K o la absorción de iones", subrayan los expertos. Además, a nivel de defensa inmunológica, "influye en la permeabilidad del epitelio intestinal y regula el sistema inmunitario asociado al tracto gastrointestinal", confirman.
Todo ello, además de los últimos estudios, revela que "hay una relación muy directa entre la composición de las bacterias del intestino y la obesidad", explica Serrano Ríos. Si esta afirmación es correcta, "la microflora intestinal de individuos obesos tendría una evidente reducción en su diversidad de especies bacterianas que revierten a la normalidad al perder peso, sea por la dieta hipocalórica o tras cirugía bariátrica", indica.
Por último el profesor emérito de la Universidad Autónoma de Barcelona y fundador de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el profesor Foz, señala que "el riesgo de mortalidad general y por enfermedad cardiovascular es menor en los individuos que se acercan a un Índice de Masa Corporal (IMC) de 30, es decir, con sobrepeso". Además, el IMC "por sí sólo puede no ser un indicador suficiente", concluye.