VALENCIA 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Coordinadora de Asociaciones de lucha contra el Sida de la Comunidad Valenciana (CALCSICOVA), Carlos Gómez, ha mostrado este miércoles su apoyo a la creación de un registro de infectados con el virus VIH por parte de la Conselleria de Sanidad siempre que mantengan su compromiso de confidencialidad y anonimato de los datos.
Al respecto, ha recordado, durante los actos concentración Día Mundial de la Lucha contra el sida en la plaza de la Virgen de Valencia, que la Comunidad Valenciana era "desde hace años una de las pocas autonomías que no disponía de este registro".
Por ello, ha mostrado su apoyo siempre y cuando la Conselleria cumplan con su palabra de que CALCSICOVA esté en la comisión de seguimiento de la implantación de ese registro para "ver cómo se pone en funcionamiento" y "cumplan con su compromiso de que los datos estén ecriptados en origen y no figuren los nombres en ningún momento", entre otras garantías.
Así, Joan Monrabal, responsable de sensibilización de Calcsicova, ha destacado que es "necesario" tener un registro y una estadística para "poder valorar las nuevas infecciones y saber dónde se puede incidir en prevención". "Si pedimos visibilidad y normalización hay que superar las reticencias y hay que convenir que este registro es necesario", ha apuntado.
Por otro lado, ha lamentado que "por poco no se celebra" este acto, que se lleva realizando desde hace 13 años en la Plaza de la Virgen, ya que ha recordado que desde que presentó la petición el pasado 14 de abril el Ayuntamiento les puso trabas porque considera este lugar como "un espacio de culto o para actos falleros".
No obstante, ha recalcado que han seguido luchando para poder celebrar el acto en esta plaza porque no es "manifestódromo" sino es "un ágora" de esta ciudad y la conmemoración del Día mundial contra el sida, como acto "relevante que sigue siendo" debe realizarse aquí para que de este modo sea visible para toda la ciudadanía.
Con todo, ha lamentado que este permiso esté condicionado a algunas restricciones como usar la megafonía sólo para leer el manifiesto y que no les hayan dejado poner música para acompañar las performances ni traer un grupo de música contemporánea. "Nos restringen totalmente crear un ambiente más armónico", ha lamentado. Sin embargo, ha señalado que prefieren celebrar el acto en esta plaza con restricciones a hacerlo en otro lugar con menos relevancia pública.
Por otra parte, ha lamentado los prejuicios que aún hoy se tienen contra los afectados desde el entorno social, laboral y familiar cuando se trata de "una enfermedad cronificada" como cualquier otra. Sin embargo, ha constatado que en la actualidad "hablar de sida sigue siendo considerado para mucha gente como un castigo de Dios". Así, ha recordado que hay estudios que revelan que los padres cambiarían a sus hijos de centro si tuvieran un compañero afectado o cambiarían de supermercado si la cajera estuviera infectada.
Así, ha señalado que esta estigmatización "atenta contra la dignidad" de estos enfermos hasta el punto de que "la gravedad hoy en día no es el diagnóstico positivo sino la estimagtización" que rodea a las personas que viven con el VIH, que "no se trata de una enfermedad infecto-contagiosa sino infecto-trasmitible". "Si las cosas cambian por qué no cambia la sociedad", ha inquirido.
Por otro lado, ha recalcado la importancia de que los colectivos de riesgo se realicen la prueba que , según las últimas estadísticas, las nuevas infecciones no han bajado, pero "más del 35 por ciento de las personas contagiadas no lo sabían en el momento de su diagnóstico". con el peligro que entraña para la expansión de la enfermedad al no tomar medidas de precaución. "Es mejor saberlo que no para poder cuidarse antes y seguir llevando una vida normal" ha apostillado.