SEVILLA 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Hospital de San Lázaro, adscrito al área hospitalaria Virgen Macarena de Sevilla, iniciará en un mes la actividad en su nueva unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria Infantil, que tiene previsto operar a unos 1.200 niños al año.
Los pacientes susceptibles de esta modalidad de cirugía, que no requiere ingreso hospitalario, serán niños mayores de tres años con patologías correspondientes a las especialidades de Cirugía General y de Otorrinolaringología, según ha informado este viernes el propio centro.
Entre las intervenciones de Cirugía General se encuentran las hernias inguinales, algunos quistes, fimosis, hernias y enfermedades del descenso testicular. Respecto a Otorrinolaringología, se intervendrán procesos de adenoides y amígdalas, entre otros.
La inmensa mayoría de los pacientes susceptibles de intervención de adenoidectomía (vegetaciones), amigdalectomía y tubos de ventilación son niños con edades comprendidas entre los tres y 14 años, siendo las edades más frecuentes los cuatro, cinco y seis años.
En un principio, podrán acogerse a esta prestación quirúrgica de Cirugía Mayor Ambulatoria infantil los pacientes residentes en Sevilla y localidades del área hospitalaria cercanas a la capital.
Los intervenidos en régimen de Cirugía Mayor Ambulatoria permanecen en el hospital entre tres y ocho horas dependiendo del tipo de intervención. Al disminuir el tiempo de hospitalización el entorno familiar se ve menos alterado y, con una adecuada información, disminuye la ansiedad familiar y mejora su colaboración.
VENTAJAS
La Cirugía Mayor Ambulatoria tiene ventajas respecto a la cirugía con ingreso. En el caso de pacientes pediátricos hay una reducción del estrés emocional que influye en una menor repercusión psicológica, miedo, ansiedad, tanto en los niños como en los padres.
Además, los pacientes que son intervenidos por la mañana podrán regresar a su domicilio tras una buena evolución postoperatoria. Para ello se utilizan técnicas quirúrgicas mínimamente agresivas, junto con técnicas anestésicas que ocasionan menores efectos secundarios.
La recuperación postquirúrgica se realizará en la sala de despertar de la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria, con capacidad para seis pacientes y en la que los niños podrán estar acompañados por un familiar.
Una vez alcanzados los criterios de alta pasarán a una habitación hasta que estén en condiciones de desplazarse a su domicilio. El hospital ha personalizados estas habitaciones con ilustraciones de cuentos clásicos infantiles con el fin de que los niños puedan restablecerse en el postoperatorio en un entorno adecuado.
Durante su breve estancia en el hospital San Lázaro, los pacientes estarán siempre atendidos por los profesionales de enfermería cualificados para proporcionar los mejores cuidados en el postoperatorio y compartir con los pacientes y con sus familiares toda la información necesaria, de manera que la convalecencia en su domicilio resulte segura y satisfactoria.
Así se consigue una rápida recuperación tras la intervención, sin alterar las condiciones familiares y sociales del paciente y sus allegados, y se consigue una pronta incorporación a sus actividades cotidianas y escolares.