SEVILLA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
La separación magnética de espermatozoides puede eliminar la población de esperma dañada, evitando así su utilización en técnicas de reproducción asistida, según revela un estudio realizado por la clínica Ginemed de Sevilla.
Este trabajo, que ha presentado la doctora Mónica Dorado en el '16 Congreso Nacional de Andrología' celebrado recientemente en Pamplona, parte de la premisa de que si se utiliza espermatozoides seleccionados no apoptóticos --los que no sufren la denominada muerte celular programada--, se consigue aumentar la tasa de embarazo evolutivo en una población de pacientes sometidos a ciclos de fecundación in vitro.
Según apunta la propia investigadora, esta mejora en la tasa de embarazo evolutivo se consigue tanto en pacientes que ya tenían un ciclo previo fallido, como en aquellos que entraban en ciclo por el factor masculino. De hecho, la apoptosis espermática es una de las causas más comunes que cursan con infertilidad en el varón.
El objetivo de este estudio se centró así en comparar la tasa de embarazo en pacientes sometidos a fecundación in vitro con espermatozoides capacitados por gradientes de densidad frente a espermatozoides capacitados por gradientes de densidad y seleccionados por separación magnética.
Los pacientes que iban a ser sometidos a fecundación in vitro se separaron de esta forma en dos grupos, que a su vez se dividieron en aquellos que habían tenido al menos un fallo previo y pacientes con infertilidad por factor masculino (ya sea por alta fragmentación o baja motilidad).
"En todos los casos en los que utilizamos las separación magnética previo a la microinyección espermática hemos conseguimos aumentar la tasa de embarazo evolutivo con respecto al grupo control", recoge la investigadora en su trabajo, en el que se plasma que, de forma global, se pasó de una tasa de embarazo del 51,1 por ciento al 60,7 por ciento cuando se usó selección magnética.
En fallos previos, la tasa de embarazo también se ha incrementado de forma muy llamativa con este método, pasando del 43,1 por ciento en el grupo control, al 53,6 por ciento en selección magnética (incremento de la tasa de embarazo del 24,36%). En esterilidad por factor masculino, Ginemed ha conseguido pasar del 53,1 al 62,8 por ciento, respectivamente.