MADRID 18 May. (EUROPA PRESS) -
"A pesar de los enormes avances científicos y tecnológicos de las últimas décadas, un virus microscópico nos ha puesto de rodillas", ha admitido el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, durante su participación en la apertura de la 73 Asamblea Mundial de la Salud en la sede de la Organización Mundial de la Salud en Ginebra.
Ante jefes de Estado, de Gobierno y ministros, representantes de los 194 países de la OMS, ha realizado un discurso muy en consonancia con el realizado horas antes por el director general de la OMS, doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien afirmaba en la inauguración de la asamblea que, "a pesar de todo el poder económico, militar y tecnológico de las naciones, este pequeño microbio nos ha humillado".
Guterres ha admitido que la pandemia de COVID-19 ha demostrado la "fragilidad global", como muestran los datos: más de 4 millones y medio de casos de COVID-19 ya han sido reportados a la OMS, y más de 300.000 personas fallecidas.
Además, se ha lamentado, "todavía no sabemos cómo erradicar, tratar o vacunar contra COVID-1. No tenemos idea de cuándo podremos hacer estas cosas".
Pero la fragilidad expuesta por el virus no se limita solo a los sistemas de salud, como ha recordado "afecta a todas las áreas de del mundo e instituciones".
A su juicio, "es hora de poner fin a la arrogancia". Los "profundos sentimientos de impotencia" deben conducir a una "mayor humildad", ya que, ha recordado, "las amenazas globales mortales requieren una nueva unidad y solidaridad".
Y espera que el desarrollo de la nueva vacuna sea "un punto de partida". Así, ha destacado ACT Accelerator que es una colaboración mundial histórica para acelerar el desarrollo, la producción y el acceso equitativo a los nuevos diagnósticos, terapias y vacunas COVID-19.
"Es esencial que estén universalmente disponibles y sean asequibles para todos, en todas partes. Son un bien público mundial por excelencia", ha advertido.
UN SALTO A UNA NUEVA Y MEJOR REALIDAD
"La pandemia es una tragedia", ha señala Guterres que insta a mirar al futuro como una nueva oportunidad para construir un mundo mejor, con "economías y sociedades más equitativas, inclusivas y sostenibles que sean más fuertes y resistentes", y poniendo a los derechos humanos en el centro de los sistemas.
"También es una oportunidad para abordar la crisis climática y la desigualdad de todo tipo, incluidas las brechas en nuestros sistemas de protección social. Es una oportunidad para reconstruir de manera diferente y mejor. En lugar de volver a los sistemas que eran insostenibles, debemos dar un salto hacia un futuro de energía limpia, inclusión e igualdad y redes de seguridad social más fuertes, incluida la cobertura universal de salud", ha explicado.
En cualquier caso, "a menos que controlemos la propagación del virus, la economía nunca se recuperará", y, por tanto, Naciones Unidas ha pedido una respuesta de salud a gran escala, coordinada e integral, guiada por la OMS, con énfasis en la solidaridad hacia los países en desarrollo. "Debemos aunar nuestros esfuerzos para ayudar a los países en mayor riesgo y fortalecer y expandir sus sistemas de salud. Esto debe complementarse con nuestra respuesta humanitaria", ha advertido.
Guterres ha instado al G20 a considerar el lanzamiento urgente de un paquete de estímulo coordinado e integral a gran escala que equivalga a un porcentaje de dos dígitos del PIB mundial. También ha solicitado un mayor apoyo a través del Fondo Monetario Internacional, el Grupo del Banco Mundial y otras instituciones financieras internacionales.