MADRID 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
Save the Children ha publicado un informe sobre atención sanitaria a la infancia en el mundo, en el que clasifica los países según su capacidad para ofrecer asistencia a los niños enfermos a través de los baremos de cantidad de personal y facilidad de acceder al servicio, y ha alertado de la falta de personal sanitario, uno de los motivos principales de una insuficiente cobertura médica en muchos países.
El documento ha sido publicado dos semanas antes de la reunión de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York (EEUU), y la organización ya ha informado que solicitará a los países ricos que aumenten su financiación a la salud. En este sentido, han indicado que la financiación actual sólo cubre un tercio de las necesidades mundiales.
Según el informe, los niños que viven en los 20 países peor valorados, tienen cinco veces más posibilidades en caso de caer enfermos que los que viven en los 20 países mejor valorados. A la luz de los datos, los dos peores países del mundo para los niños en cuanto a estas condiciones son Chad y Somalia, mientras que los dos mejores son Suiza y Finlandia.
El índice muestra, además del número de personal sanitario y su alcance, la proporción de niños que reciben el ciclo de vacunación completo y las madres que reciben la asistencia de emergencia en caso de que el parto se complique.
"Nos enfrentamos a una carencia global de más de 3,5 millones de doctores, enfermeros, ayudantes de parto y trabajadores comunitarios. Sin ellos no se pueden administrar las vacunas, no se pueden prescribir los medicamentos y una mujer no puede tener una asistencia adecuada durante el parto. Enfermedades fácilmente tratables como la neumonía y la diarrea se convierten en mortales", afirma el texto.
"La supervivencia de un niño depende de donde nazca", ha señalado el presidente ejecutivo de Save the Children, Justin Forsyth. "Ninguna madre debería ver sin poder hacer nada como sus hijos crecen enfermos y mueren únicamente porque no hay gente capacitada para ayudarle", ha agregado.
"Los líderes mundiales deben hacer frente a las carencias de personal médico y darse cuenta de que los errores en la financiación de este asunto cuestan vidas. Incluso los países más pobres del mundo podrían hacer verdaderos progresos si dedicaran el 15 por ciento de sus presupuestos a la sanidad", ha dicho Forsyth.
Uno de los problemas es la dificultad para el acceso a los trabajadores médicos. En Etiopía, el 70 por ciento de las mujeres afirman que las clínicas sanitarias están muy alejadas de sus viviendas, mientras que en Sierra Leona, Uganda y Níger, el 50 por ciento de las mujeres señalan encontrarse en la misma situación.
Por último, la organización ha destacado la importancia de que las mujeres trabajen en el sector, ya que su presencia "es crucial en países como Afganistán, Nepal y Etiopía, donde las mujeres no pueden acudir a un médico hombre por razones culturales".