MADRID, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El sindicato de Enfermería (Satse) ha solicitado a la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Carmen Montón, que, tras haber aprobado el real decreto por el que se devuelve la universalidad al Sistema Nacional de Salud (SNS), elimine el copago farmacéutico a los jubilados para aumentar el porcentaje del Producto Interior Bruto (PIB) que se destina a la sanidad pública.
Así, y tras reiterar que la normativa aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez, que este lunes ha sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), es "justa y coherente" con el principio universal de asegurar una atención sanitaria de calidad a todas las personas, ha solicitado al Ministerio de Sanidad que trabaje de manera "conjunta y coordinada" con las distintas consejerías de salud que este derecho vaya acompañado de los recursos materiales y humanos necesarios para asegurar un normal funcionamiento en los centros sanitarios.
Dicho esto, Satse ha recordado que siempre se ha mostrado contrario a cualquier fórmula de copago en el ámbito sanitario, al entender que los pacientes y ciudadanos que necesitan la atención del SNS ya pagan por los servicios que reciben, a través de sus impuestos, y que existen distintas alternativas que mejorarían la situación de la sanidad, "sin tener que recurrir a cobrarles dinero cuando reciben la prestación sanitaria".
Por ello, ha reclamado a la ministra de Sanidad que acabe con el copago farmacéutico que, en la actualidad, grava a las personas jubiladas. "Es una medida injusta que castiga a la persona enferma y a los más débiles, y, además, conlleva desigualdades sociales y más carga burocrática", ha insistido el sindicato.
Al mismo tiempo, el sindicato ha solicitado aumentar el porcentaje del PIB destinado a la sanidad pública hasta el 7 por ciento, un objetivo que públicamente ya ha manifestado que comparte con la organización sindical. "Hemos reclamado en numerosas ocasiones una mayor inversión en la sanidad pública española después de años en los que se ha ido debilitando y deteriorando el SNS por la continua reducción del gasto sanitario, pasando del 6,7 por ciento del PIB en 2009 al actual 5,8 por ciento", ha zanjado Satse.