MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato de Enfermería (Satse) ha denunciado que las "precarias condiciones laborales" que ofrecen los distintos servicios de salud a los enfermeros graduados, con salarios de unos 1.300 euros brutos, "siguen provocando la fuga de talento enfermero a otros países, algo especialmente perjudicial cuando se producen crisis sanitarias como la actual de COVID-19".
Satse ha elaborado un estudio comparativo entre los servicios de salud de las diferentes comunidades autónomas y ha concluido que, tras los años de recortes en derechos y prestaciones, "no han mejorado los salarios base para cualquier enfermero que ha finalizado sus estudios universitarios de Grado y se incorpora al mercado laboral", por lo que siguen situándose en torno a una media de 1.300 euros brutos mensuales.
"Esta falta de reconocimiento salarial, junto a la alta temporalidad y precariedad que sufren, encadenando, en el mejor de los casos, contratos de días o semanas, lleva a muchos jóvenes enfermeros graduados a no ver otra alternativa que emigrar a otros países europeos o de fuera del continente en busca de mejores condiciones laborales y retributivas. Una lamentable realidad laboral a la que se suman las difíciles y penosas condiciones de su ejercicio diario, al estar expuestos de manera permanente a numerosos riesgos físicos y psicológicos de todo tipo, añade", lamentan en un comunicado.
En este sentido, la organización sindical recuerda que España está haciendo una "inversión muy importante" para formar y capacitar a los enfermeros en sus cuatro años de Grado universitario y dos años más si optan por hacer una especialidad, y son otros países "los que se están aprovechando de la excelencia formación universitaria, mejorando sus sistemas sanitarios de salud sin coste adicional alguno".
"Las perjudiciales consecuencias de esta fuga de talento enfermero a otros países, con miles de profesionales trabajando fuera de España, se han constatado especialmente durante la actual crisis sanitaria, al no poder recurrir a ellos para atender y cuidar como se merecen a todas las personas afectadas por la enfermedad o para realizar labores de detección y seguimiento de la misma, sin olvidar el resto de patologías y procesos de mejora de la salud que requieren de estos profesionales", critican.
"Se da la lamentable paradoja que al mismo tiempo que España sufre un histórico y crónico déficit estructural de enfermeros en los hospitales y centros de salud, se permite que miles de profesionales perfectamente cualificados y capacitados, tras cuatro años de estudios universitarios de grado, tengan que hacer las maletas y dejar a sus familias y amigos para buscarse la vida en otros países", argumentan desde la organización sindical.